Continúa el castigo al dólar
En la última semana la cotización del dólar continúa en una senda de debilidad. Esta vez, a la incertidumbre política se le añade la publicación en EE UU de datos macroeconómicos poco alentadores (el déficit comercial estadounidense creció bastante más de lo previsto y el paro semanal fue peor de lo esperado). Ello incrementa la cautela en el mercado de divisas, que vuelve a mostrarse desconfiado frente al dólar.
Desde comienzos del mes de febrero, el dólar ha alcanzado su peor nivel en la primera semana, cuando registró su máximo mensual (1,0857 dólares por euro) y mostró una cotización media de 1,0815 dólares el euro. Si el mes terminase a los niveles de la última semana, en febrero el dólar habría registrado una cotización mensual media de 1,077 dólares por euro, frente a los 1,060 dólares el euro que marcó en enero, los 1,010 de diciembre de 2002 y los 1,002 de noviembre. Esto supone que, en lo que va de año, el euro ha incrementado su valor frente a la divisa americana, aproximadamente, en un 6,6%.
El yen también se ha visto perjudicado en febrero, donde la cotización media acumulada del mes se sitúa en los 129,385 yenes por euro, frente a los 126,081 yenes por euro de media en enero.
A pesar de ello, en una comparación semanal, en los últimos siete días la divisa nipona ha recuperado cerca de un 1,8% de su valor frente al euro, mejorando la mala evolución de semanas anteriores.
El euromercado no reacciona a los datos
En Estados Unidos, los indicadores de enero han sorprendido favorablemente. Por el lado de la oferta, la producción industrial ha crecido un 0,7% intermensual, mejorando nuestra previsión. El empleo total ha aumentado 143.000 personas, el mayor incremento desde noviembre de 2000 y la tasa de paro se ha reducido hasta el 5,7%. Por el lado de la demanda, los indicadores publicados también han sido positivos. Las ventas de coches han sorprendido favorablemente, y las ventas al por menor recientemente publicadas también han sido buenas. En este mes las ventas han crecido un 4,0% interanual (2,2% en el cuarto trimestre de 2002). Destacar además que, excluyendo automóviles, las ventas han sido muy positivas, creciendo un 4,8% interanual. En otras circunstancias estos datos habrían tenido efectos muy positivos sobre los mercados financieros. No obstante, bajo la situación actual, los mercados no han reaccionado. En el euromercado, la ETTI en dólares sigue dibujando un perfil plano, y los futuros a tres meses tampoco descuentan subidas de tipos de interés. Ello refleja que los inversores están más pendientes de la política.
Estabilidad de tipos en el mercado de la UE
La estabilidad ha sido la nota predominante en el euromercado en la última semana. Las multitudinarias manifestaciones en contra de la guerra que recientemente se han celebrado en todo el mundo han impedido, al menos transitoriamente, que se materialice el ataque de Estados Unidos sobre Irak. En este compás de espera, los inversores no han alterado sus posiciones de cartera en ninguna divisa, manteniéndose constantes las cotizaciones respecto a la semana anterior. En euros la ETTI sigue configurando un perfil decreciente, con una pendiente entre los tipos a 1 año y 1 mes de -29 puntos básicos (pb) y de -7 pb en libras. En dólares, la ETTI es plana hasta los 6 meses y suavemente creciente entre 6 meses y 1 año. De cara a los próximos meses el escenario barajado por los inversores es el siguiente: en euros, el mercado espera un recorte de 25 pb para junio y de otros 25 pb para septiembre con una probabilidad elevada. En libras las expectativas también son bajistas de cara junio, con un descenso previsto de 25 pb.