El cambio de las tarifas de las Bolsas amenaza el negocio de arbitraje
La Bolsa de Barcelona ha experimentado un fuerte aumento en el negocio durante los últimos dos años. Ha ganado cuota de mercado, fundamentalmente al mercado madrileño. La Bolsa de Barcelona ofrecía a los intermediarios la posibilidad de agrupar órdenes de un mismo cliente y de un mismo valor a la hora de pagar.
Esto quiere decir que, aunque un inversor vendiese varias veces a lo largo de un día y a distintos precios acciones de un valor, la Bolsa de Barcelona cobraba como si sólo se hubiese hecho una operación. Las órdenes, eso sí, eran introducidas en el sistema de interconexión bursátil de forma independiente.
Este sistema facilitaba en gran medida la labor de los arbitristas, esto es, de los grandes inversores que sacan el dinero de intermediar entre distintos precios del mismo activo. Por ejemplo, si ven que el dólar está unas centésimas más barato en Londres que en Nueva York, compran en Londres y venden en Nueva York. En España este arbitraje se centra en las operaciones con contado y futuros.
En cualquier caso, como estos operadores realizan una gran cantidad de operaciones, les favorecía mucho la posibilidad de agrupar órdenes. Algunos miembros del mercado afirman que, para este tipo de inversor, el coste de operar en la Bolsa de Barcelona era la mitad que en la Bolsa de Madrid. De hecho, algunas sociedades de valores optaron por hacerse miembros de la Bolsa de Barcelona para pagar menos canon al permitirse la agrupación de órdenes.
Al arrancar 2003, el holding de Bolsas decidió eliminar la posibilidad de agrupar órdenes. Sólo se podrá hacer cuando el precio es el mismo. El sistema anterior beneficiaba a la Bolsa de Barcelona, que atraía negocio de otros mercados. Pero la sociedad de mercados financieros no quiere hacerse la competencia a sí misma y, por eso, ha decidido modificar las tarifas.
Los intermediarios que se dedican al arbitraje ya han advertido que esta modificación puede no compensar al propio holding. 'Si los gastos de arbitrar suben, puede que este tipo de operativa termine por, simplemente, no realizarse, o hacerlo con un volumen mucho menor. Lo que el holding gana por un lado lo puede perder por otro', afirma un miembro del mercado.
No obstante, el holding ha tomado medidas que favorecen a los arbitristas, como, por ejemplo, exonerar el 50% de las comisiones que cobran las Bolsas por operaciones con cestas de valores Ibex que impliquen, a un tiempo, negociación de futuros en MEFF. O una exención total para órdenes superiores a 100.000 euros que permanezcan más de un minuto en el mercado. Por otro lado, se ha eliminado la bonificación por operaciones por cuenta propia.