Siemens rebaja su previsión de ventas y descarta ajustes adicionales de empleo
El presidente de Siemens, Heinrich von Pierer, estimó hoy que el próximo año la compañía experimentará un nuevo descenso en las ventas, ya que persistirán las dificultades económicas globales y las dudas sobre algunos conflictos políticos en diferentes lugares del mundo, lo que provocará una reducción de las inversiones de sus clientes, especialmente en el sector de las telecomunicaciones.
El máximo responsable de la compañía alemana destacó los resultados obtenidos en su ejercicio fiscal, en el que Siemens incrementó un 24% su beneficio neto, hasta 2.600 millones de euros, a pesar del descenso de las inversiones de los clientes de telecomunicaciones. "En el último ejercicio nos defendimos bien. Conseguimos que diez de nuestras divisiones obtuvieran márgenes positivos", explicó.
No obstante, mostró su preocupación por la evolución de algunas de sus divisiones en 2003, sobre todo Siemens Dematic (dedicada a logística), y las deficitarias ICN y Solution and Services, que no conseguirán mejorar sus márgenes el año que viene. Asimismo, estimó que a otras tres divisiones (VDO Automotive, Building Technologies y Power Transmisión and Distribution) les queda un camino por recorrer, aunque sería posible que se acercaron en gran medida a sus objetivos.
Así, cuatro de sus divisiones (Power Generation, Transportes, Medical Solutions y Servicios Financieros) podrán repetir o mejorar ligeramente sus resultados en 2003, a pesar de que en algunos casos, como en el de Power Generation, se producirá un descenso significativo de los nuevos pedidos en Estados Unidos.
Descarta ajustes adicionales de empleo
El presidente de la compañía señaló además que después de los planes de reestructuración puestos en marcha en 2002, la dirección no está planeando nuevas medidas para mejorar la situación de algunas de sus ramas deficitarias, aunque dejó la puerta abierta a posibles nuevas supresiones de empleo en función de la evolución hasta septiembre de 2003.
Von Pierer señaló que se ha ralentizado significativamente el desarrollo de la telefonía móvil de tercera generación (UMTS), ya que la demanda ya no es tan fuerte, por lo que en 2003 Siemens únicamente sacará el proyecto de teléfono móvil con Motorola y esperará a 2004 para sacar al mercado su propio modelo.