El 61% del empleo creado en el tercer trimestre fue en el sector público
En el tercer trimestre del año se han creado 116.000 nuevos puestos de trabajo, de los cuales 71.500 los ha generado el sector público en cualquiera de sus Administraciones (central, autonómica o local), según los datos de la última encuesta de población activa (EPA).
Esto supone que el 61% del total del empleo creado es público. Se trata, por tanto, de la primera vez en nueve años que en un trimestre la mayoría del avance de la ocupación se sostiene fundamentalmente con empleo público.
Si se analiza el comportamiento del empleo en el tercer trimestre de años anteriores, se observa que el empleo público ha ido ganando peso desde el 29% del total de los nuevos puestos creados en 2000 y el 44% de 2001.
Esto es aún más llamativo si se tiene en cuenta que el tercer trimestre del año comprende los meses de mayor actividad turística, lo que, en teoría, no se correspondería con una mayor necesidad de empleo en las Administraciones públicas.
La creación de empleo público no ha sido igual en todas las Administraciones. Los ayuntamientos son los que más empleo han creado en el tercer trimestre, con 30.300 nuevos empleos. Seguidamente se sitúan las comunidades autónomas, donde se han creado 29.000 empleos públicos. Finalmente está la Administración central, que ha creado 11.700 nuevos puestos de trabajo. Sólo la plantilla de la Seguridad Social perdió trabajadores entre julio y septiembre, con 2.700 empleos menos.
Y este aumento de las plantillas públicas no ha sido mayor en los últimos años debido a la decisión del PP al llegar al poder en 1996 de limitar al máximo la contratación en el sector público. Para ello, estableció desde ese año un tope según el cual sólo se podían reponer el 25% de las bajas vegetativas que se produjeran en las Administraciones públicas.
A medida que han ido pasando los años y se han ido transfiriendo las competencias desde el Estado a las comunidades autónomas, el Gobierno ha ido abriendo la mano del empleo público y estableciendo excepciones al tope del 25% en algunos sectores más aquejados por las necesidades de personal. Entre ellos, la policía, el personal sanitario, los investigadores o los ayuntamientos de menos de 50.000 habitantes.
Crecimiento en 2001
Como fruto de estas excepciones las plantillas públicas empezaron a aumentar en mayor medida a partir del año 2000. Este incremento se tradujo en que, un año después, en 2001, el empleo público creció a un ritmo del 9%, el triple de lo que lo hizo en el sector privado.
Pero además, a partir de 2003 se abrirán aún más las puertas de la contratación en el sector público gracias al acuerdo firmado ayer por el Gobierno y los sindicatos (CC OO, UGT y CSI-CSIF). Este pacto elimina el tope del 25% y permite que vuelvan a reponerse el 100% de las bajas que se produzcan en el sector público, tal y como ocurría antes de 1996.
Esto aumentará aún más, en los próximos años, la creación de empleo, sobre todo en la Administración autonómica y en los ayuntamientos, que son las que ya cuentan con más personal a su cargo, una vez que prácticamente se ha culminado el proceso de transferencias.
El último registro oficial de personal indica que la Administración central cuenta en la actualidad con 563.989 trabajadores, el 24,1% del total de los empleados públicos, mientras que las autonómicas cuentan ya con 1.101.999 asalariados, el 48% del total. Los ayuntamientos tienen registrados 563.989 trabajadores, el 24%.
Además de eliminar los topes a la contratación pública, otro de los puntos del acuerdo ratificado ayer entre Gobierno y sindicatos es el que fija el objetivo de reducir los contratos temporales en las Administraciones públicas al 8%.
Este objetivo pretende poner freno a este destacado aumento del empleo precario en las Administraciones, que en la actualidad afecta a una media del 22,1% de los trabajadores, cuando en 1997 eran el 15,6% los empleados públicos con contrato temporal. Esto supone un aumento de la temporalidad del 41% en los últimos seis años.