Bayer cierra la planta de Barcelona y prescinde de 230 trabajadores
Bayer prevé cerrar a finales de este año el acuerdo definitivo para traspasar a Indukern Group la producción de las cinco especialidades farmacéuticas de prescripción que fabrica en la planta de la calle Calabria, en Barcelona (Actira, Adalat, Canesten, Glucobay y Nimotop). Esta decisión afecta a una plantilla de 230 personas. Fuentes sindicales afirmaron que 120 trabajadores aceptarían el traslado a la factoría de Terrassa (Barcelona) de Kern Pharma, la filial del grupo español que asumirá la producción.
Sin embargo, 'habrá que terminar las negociaciones abiertas para igualar las condiciones laborales de Indukern con las de Bayer', matizaron las mismas fuentes. El resto de la plantilla se prejubilará. Bayer emitió ayer un comunicado en el que anunciaba el principio de acuerdo con Indukern, aunque no concretaba el coste laboral de la operación. La nota de la multinacional alemana valoraba positivamente el traslado, porque 'el grupo mantendrá sus actividades productivas en el área farmacéutica de Cataluña por vía de la externalización'.
Efectivamente, Indukern Group, que acaba de celebrar su 40 aniversario, concentrará en la factoría de Terrassa (adquirida en 1999 a Roche, que a su vez la heredó de la compra de Boehringer Manheim) la fabricación de los cinco medicamentos citados, con la voluntad de ampliar la producción del centro, según indicó el comunicado de Bayer. Ningún portavoz de Indukern quiso confirmar este extremo.
Este grupo, propiedad de José Luis Díaz-Varela, se convertirá en el principal fabricante del sector para terceros después de asumir la producción de Bayer, pasando de los actuales 33 millones de unidades anuales a 80 millones en 2005. La facturación de Kern Pharma fue de 23,4 millones en 2001, con una plantilla de 260 personas. Las previsiones para este año apuntan un aumento del 40% tanto en ventas como en beneficio. El grupo Indukern registró una facturación de 420 millones en 2001, con un total de 700 trabajadores.
Planta de Asturias
Con la externalización de la producción y el cierre de su única factoría de medicamentos, Química Farmacéutica Bayer (QFB), la filial española del grupo alemán, concentra su producción en la planta de La Felguera (Asturias), donde inauguró en septiembre pasado una nueva línea de un principio activo para la industria cosmética. Esta factoría se ha convertido en el centro de competencia mundial (fabrica el 80%) del ácido acetilsalicílico, la base química de la aspirina.
Precisamente, el cierre del centro de Barcelona también ha afectado a la producción de envasado de una de las presentaciones de aspirina, que se ha trasladado a otro centro del grupo.
La factoría de Barcelona inició su declive a principios de la década pasada, cuando la central alemana decidió trasladar parte de este popular analgésico a una factoría ubicada en la antigua Alemania del Este. Más tarde, Bayer vendió la línea de dermocosméticos (Delial y Quenty) a Sara Lee, que también fabricaba en Barcelona.
La decisión definitiva de cierre no tiene nada que ver con el acuerdo que Bayer suscribió ayer con el grupo estadounidense Johnson para venderle la actividad de insecticidas domésticos (Baygon y Autan), según afirmó un portavoz de Bayer. Tampoco han influido los problemas de la multinacional alemana en el último año (con la retirada del fármaco Lipobay), señalaron las mismas fuentes. Con todo, QFB mantendrá en la calle Calabria las oficinas de cinco divisiones a corto plazo. La compañía estudiará la venta de los inmuebles.