Los sindicatos responsabilizan a Seat del conflicto y piden a Piqué soluciones
Los secretarios generales de CC OO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez, respectivamente, han negado hoy responsabilidades sindicales en el conflicto de Seat y lo han atribuido a las decisiones de la propia compañía, a la que han recordado que se ha beneficiado del erario público español desde que se instaló en el país.
El líder de CC OO, ha asegurado que es "absolutamente falso" que haya sido responsabilidad de los sindicatos el traslado de parte de la producción del modelo Ibiza a Bratislava. En su opinión, si las centrales sindicales en Seat han cometido algún error fue el no de insistir más claramente en que la empresa tenía desde hace tiempo tomada esta decisión.
Por su parte, el dirigente de UGT, que ha señalado que el Ejecutivo español tiene en este conflicto una responsabilidad política, ha afirmado que "no es momento" de hablar del pasado, sino de buscar soluciones negociadas. A su juicio, el sector del autómovil precisa de un 'observatorio' como el establecido en el sector químico para prever los movimientos y el futuro del mercado.
En este sentido, los líderes sindicales han criticado duramente al ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, por augurar problemas similares en el sector en lugar de dedicarse a buscar soluciones. "El señor Piqué es ministro, no es una señal de tráfico que dice por aquí se va a Bratislava", ha ironizado Fidalgo.
La solución al conflicto de Seat
El ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, anunció ayer que Seat ha garantizado empleo y producción en línea con los registros actuales en la planta de Martorell (Barcelona), pese al reciente anuncio de la marca española de trasladar un 10% de la producción del Ibiza a Bratislava, decisión que mantiene.
Piqué se reunió ayer con el presidente de Seat, Andreas Schleff, en la sede de su departamento, para analizar la situación creada por la marca española del Grupo Volkswagen con esta decisión anunciada la semana pasada en el Salón del Automóvil de París.
En unas breves declaraciones tras el encuentro con Schleff, Piqué agregó que estas garantías son a corto plazo, ya que a largo plazo las decisiones dependerán de la flexibilidad de la plantilla de Martorell.