Alcatel despide a 23.000 trabajadores y reduce la plantilla a la mitad en tres años
La baja demanda de equipos por las operadoras telefónicas, que recortan inversiones para aligerar su abultada deuda, explica la crisis de la compañía francesa, que tiene en España unos 3.200 trabajadores.
Alcatel anunció en un comunicado que, 'debido al prolongado deterioro de los mercados de telecomunicaciones', negociará con los sindicatos 'una aceleración de su programa de reestructuración' para mantener sus objetivos de volver a beneficios al cierre de 2003.
En ese momento la plantilla deberá haberse reducido hasta 60.000 personas. A finales de junio, el número de empleados era de 83.000 y al cierre del ejercicio 2000 alcanzaba los 113.000. Es decir, en tres años la plantilla se habrá reducido a la mitad.
El plan de ajuste afecta ahora a 23.000 trabajadores, 10.000 más de los anunciados el pasado mes de junio. La distribución de ese recorte por países no se conocerá al menos hasta el lunes, cuando el presidente del grupo, Serge Tchuruk, iniciará las conversaciones con el comité de empresa europeo de la compañía.
Alcatel realizará una provisión de 500 millones de euros para afrontar esta reestructuración con cargo a la cuenta de resultados de los próximos tres trimestres. El ajuste será financiado con la venta de activos que no fueron precisados.
Sin embargo, Alcatel descarta que vaya a tener que enajenar activos para hacer frente a las obligaciones financieras, con lo que responde a los temores del mercado de que tuviera problemas de liquidez.
El objetivo sigue siendo cerrar 2003 con números negros, después de que durante cinco trimestres consecutivos Alcatel haya acumulado pérdidas de 7.500 millones de euros. Alcatel espera alcanzar el equilibrio financiero a partir de unas ventas de 12.000 millones de euros el año próximo. La compañía espera superar sobradamente ese volumen de negocio, que es un 25% inferior al actual.
Para la segunda mitad del año 2002 Alcatel anuncia un descenso del 10% en su facturación, con mayor debilidad en el tercer trimestre y mayor fortaleza en el cuarto. También otras compañías que proveen de equipos de telecomunicaciones, como Nortel y Lucent, habían anunciado menores ventas este año.
Fuentes de Alcatel España no pudieron precisar cómo afectará aquí la reestructuración. Al cierre de 2001 el grupo tenía en España 4.300 empleados, pero está en marcha un plan laboral para suprimir 1.300 puestos, con lo que al final de este año quedarán unos 3.000. El ajuste incluye a 500 personas que trabajan en la fábrica de Toledo, que fue vendida a Sanmina.
Actualmente, los empleados del grupo son cerca de 3.200, de los que 1.900 se encuentran en Madrid, entre la sede central y la fábrica de Tres Cantos; unos 200 en Santander, donde produce fibra óptica, y el resto, repartido entre varias provincias.
La crisis de Alcatel se corresponde con la mala situación del mercado europeo de telecomunicaciones. Los operadores han dado prioridad a la reducción de su deuda sobre la inversión en nuevos equipos, situación que se agrava por el retraso en el lanzamiento de la telefonía móvil de tercera generación.