La OMC rechaza la ley 'antidumping' de EEUU por incompatibilidad con la normativa internacional
La Organización Mundial del Comercio (OMC) cedió a finales de agosto a las presiones de la UE y Japón, y creó un grupo de estudio para examinar las leyes antidumping de EEUU. Hoy, la Organización ha rechazado esta ley, aprobada en octubre de 2000, y que permitía a Washington distribuir los ingresos logrados a través de medidas y sanciones entre las empresas estadounidenses que denunciaron prácticas desleales, y destinarlos a inversiones en plantas de fabricación o en tecnología. EEUU podrá presentar un recurso en un plazo de 60 días; si no lo hace, el dictamen será definitivo.
La norma fue denunciada por la UE y otros diez socios de la OMC, Australia, Brasil, Canadá, Chile, India, Indonesia, Japón, Corea, México y Tailandia, y otros seis se sumaron como terceros, Argentina, Costa Rica, Hong Kong, China, Israel y Noruega. El panel de la OMC ha recomendado a EEUU que retire la ley.
Hasta ahora, Estados Unidos ha realizado una ronda de redistribución de ingresos procedentes de medidas antidumping. Fue en enero de 2002 y el importe ascendió a 213 millones, repartidos principalmente entre empresas siderúrgicas. La segunda está prevista para el próximo noviembre.
Polémica enmienda Byrd
El comisario europeo de Comercio, Pascal Lamy, mostró su satisfacción por el resultado del panel y confió en que Estados Unidos, "ante la clara condena a la norma en sí misma y los grandes intereses que están afectados, revoque pronto la enmienda Byrd, tal como ha recomendado el panel".
Según Bruselas, el panel de la OMC ha confirmado que la norma es una "respuesta ilegal al dumping y los subsidios" porque supone ofrecer a las empresas estadounidenses una solución que "no está prevista en la OMC" y les concede una "ventaja competitiva" que sólo puede eliminarse una vez que ha desaparecido el caso de dumping o subvención, además de crear un incentivo para que la industria presente denuncias.
Sobre este punto concreto, la Enmienda Byrd también va en contra de disposiciones de la OMC según las cuales las autoridades deben asegurarse de que los denunciantes de un caso de dumping representan un porcentaje significativo de la producción nacional, un mecanismo que pretende asegurar que la denuncia responde a una preocupación extendida en la industria, no a un caso concreto.
Este revés para EEUU llega apenas dos semanas después de la decisión de la OMC de permitir a la UE imponerle sanciones comerciales por su normativa sobre subvenciones a la exportación (Foreign Sales Corporations, FSC) y en medio de otro contencioso que también ha llegado a Ginebra, la imposición de aranceles a la entrada de ciertos productos de acero en Estados Unidos.