Telefónica pide libertad de tarifas para la banda ancha
El presidente de Telefónica de España, Julio Linares, ha señalado hoy que la actual política regulatoria obliga a que cualquier innovación de un nuevo servicio de Telefónica tenga que ser ofrecida como servicio mayorista a otros operadores, lo que perjudica la innovación, mientras que los precios fijos en banda ancha inciden también sobre los de interconexión con otros operadores, lo que repercute sobre la rentabilidad de las inversiones.
Linares, quien ha intervenido hoy en el XVI Encuentro de Telecomunicaciones organizado por la patronal del sector Aniel en la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo, cree que los consumidores han sido los grandes beneficiarios de la liberalización del sector, mientras que los instaladores y suministradores viven una crisis ocasionada por la falta de inversión de los operadores entrantes.
El presidente de Telefónica califica la situación de desequilibrada e inestable, por "el entorno regulatorio más exigente de Europa", con una regulación de precios máximos que son los más exigentes de Europa. Explicó que hasta junio Telefónica había perdido una cuota de mercado de tráfico del 27,1%, de la que el Grupo Auna tenía el 14,5%, UNI2 el 7,6%, ONO el 1,1% y Jazztel el 0,9%.
Para Linares el futuro del sector está en la banda ancha, en la que Telefónica ha invertido, entre 2001 y 2002, 1.500 millones. Afirmó que en los últimos meses, se ha frenado el crecimiento de nuevos clientes de banda ancha, que ha llegado a los 850.000, incluyendo todas las tecnologías, y en la que ADSL tiene el 70% de la cuota.
El 89% de las líneas están preparadas, según él, para dar servicios de ADSL y que a partir de ahora sólo se seguirá invirtiendo si crece la demanda, para lo que pidió medidas que favorezcan el incremento de los PCs en los hogares.