_
_
_
_
UE

Los consumidores europeos aún desconfían del mercado único

La CE está estudiando la elaboración de una directiva marco sobre protección de los consumidores en la UE. La norma tiene por objetivo armonizar las prácticas comerciales entre empresas y consumidores, desde la publicidad y el marketing abusivo hasta los servicios posventa. La necesidad de armonizar la protección de los consumidores se basa en la constatación de que la falta de confianza de éstos hace que las compras transfronterizas sean prácticamente inexistentes.

El mercado interior se basa en la confianza de los consumidores. Pero éstos no parecen fiarse demasiado. El comisario europeo de Salud y Protección al Consumidor, David Byrne, se apoya en un estudio reciente de la Comisión Europea (CE) para asegurarlo. Según este informe, los consumidores de la UE tienen una confianza sensiblemente menor en las compras transfronterizas que en las realizadas en su propio país.

Por esa razón, y para que el mercado único europeo sea una auténtica realidad, la CE prepara una serie de medidas encaminadas a 'establecer reglas más simples y uniformes, un grado de aplicación similar en el conjunto de la Unión, medidas de información y educación más accesibles para los consumidores y mecanismos de recurso eficaces'.

La intención de Byrne es permitir a consumidores y empresas, especialmente a las pymes, realizar transacciones sin tener que preocuparse por las fronteras reales o virtuales entre comprador y vendedor.

Porque según la Comisión Europea, para las empresas, y sobre todo para las pymes, la diferencia de trato que cada Estado miembro da a prácticas comerciales idénticas supone un factor de disuasión frente a las ventas transfronterizas y la explotación del mercado interior.

La CE está preparando una directiva para armonizar las normas nacionales en materia de protección al consumidor. Para ello ha realizado, a través de un Libro Verde, una amplia consulta entre las partes implicadas, Estados miembros, asociaciones de consumidores, empresas...

En las respuestas al Libro Verde, una amplia mayoría de Estados miembros y una mayoría de otros actores han expresado su deseo de que la CE elabore una directiva marco sobre las prácticas comerciales leales ('competencia leal'). Las prácticas leales consisten en proteger el interés de los empresarios en que se les asegure la posición adquirida en el mercado, el interés del consumidor en que no se desvirtúe su capacidad de decisión y el interés público en el mantenimiento de un orden concurrencial y no falseado.

La directiva marco armonizaría las normas nacionales de equidad de las prácticas comerciales entre empresas y consumidores (publicidad, marketing agresivo y servicios posventa, entre otros).

Archivado En

_
_