Vodafone registra las mayores pérdidas de la historia británica
Vodafone, líder mundial de telefonía móvil, ha comunicado hoy que perdió 21,2 millones de euros durante su ejercicio fiscal, cerrado el 31 de marzo, frente a unas pérdidas de 8,086 millones de euros en el ejercicio anterior. El volumen de negocio del grupo de telecomunicaciones se elevó 36.000 millones de euros, lo que supone un aumento del 52%. El beneficio operativo (EBITDA) fue de 10.093 millones de libras, cifra que coincide con la parte alta de las previsiones de los analistas, y que supone un alza del 44% en relación con el ejercicio precedente.
A pesar de los 'números rojos', Vodafone subrayó que estos resultados "representan una excelente evolución en condiciones competitivas y demuestran la continua fortaleza operativa del grupo en un período en que implantó con éxito su nuevo plan estratégico". Para el ejercicio 2002-2003, Vodafone prevé que su número de abonados crezca algo menos del 10% y que sus ingresos por cliente se incrementen en la mayoría de los mercados europeos, lo que supondrá un aumento de dos dígitos de su volumen de negocio.
La razón principal esgrimida por los portavoces del grupo a la hora de explicar estos pésimos resultados ha sido el precio que Vodafone ha tenido que pagar por la compra de determinados activos. Según los expertos, el líder mundial del móvil tendrá que sanear unos 15.820 millones de euros en sus cuentas fiscales de 2002 para ajustar a su precio actual el valor de las participaciones compradas en la desaforada carrera que protagonizó para alcanzar su tamaño actual.
La compañía británica limitó las amortizaciones extraordinarias a 6.000 millones de libras, centradas en compañías de telefonía fija controladas por el grupo británico, y en negocios de móviles donde tiene una participación minoritaria: Arcor en Alemania, la francesa Cegetel, Japan Telecom, el mexicano Grupo Iusacell y China Mobile, además de la adquisición de Mannesmann y la española Airtel. El banco de inversión Lehman Brothers estimaba una amortización de 15.000 millones de libras, centrada en los activos de Mannesmann, y JP Morgan Chase situaba ese epígrafe entre 10.000 y 15.000 millones.
Vodafone se ha gastado 226.000 millones de euros en adquisiciones desde enero de 2000 y los analistas aseguran que los saneamientos que tendrá que hacer ahora por ellas demostrarán que las compró a precios disparatados. El líder mundial del móvil pasará sin duda a la historia por protagonizar la mayor opa hostil de todos los tiempos, al pagar 183.000 millones por la alemana Mannesmann. Vodafone pagó a los accionistas del conglomerado germano más del doble del precio medio de las acciones en el mes previo a la adquisición.
Los títulos de Vodafone cayeron ayer un 7,1%, lo que implica un descenso acumulado del 42%. En la jornada de hoy, por contra, subían un 4,05% a primera hora de la mañana para colocarse en 109 euros. El mercado reacciona positivamente, según los analistas, al positivo beneficio operativo de la compañía, mejor del esperado por los expertos.