Las aseguradoras confían en duplicar el patrimonio gracias al nuevo IRPF
Sin embargo, este crecimiento no se producirá sólo a costa del negocio de los planes: el sector prevé que se produzca una cierta canibalización con respecto a otros productos aseguradores.
La nueva reforma del IRPF multiplicará las posibilidades de negocio de las aseguradoras. Las compañías podrán comercializar seguros similares a los planes de pensiones individuales que tendrán las mismas ventajas fiscales.
Con ellos, prevén captar en cuatro años el volumen que tienen ahora los planes individuales después de 14 años de existencia: 43.829 millones de euros, según fuentes del sector. Esto supondría duplicar el ahorro gestionado por los seguros de jubilación.
El Gobierno aceptó hace una semana la propuesta de la comisión para elaborar el nuevo IRPF, dirigida por el catedrático Manuel Lagares, de admitir los llamados planes de previsión del asegurado, más conocidos como seguros clónicos. æpermil;stos tendrán la misma iliquidez que los planes de pensiones, es decir que no se pueda rescatar la inversión hasta la jubilación o en supuestos muy excepcionales, y que el cliente pueda traspasar su inversión de un producto a otro sin impacto fiscal. Y, a cambio, gozarán de las amplias deducciones que tendrán los planes.
Esta decisión zanja la polémica de las aseguradoras del ramo de vida con el Gobierno en los últimos tiempos, presidida por la insistente reivindicación de igualar el trato fiscal de sus seguros con los planes y que ha sido rechazado en repetidas ocasiones por el Ejecutivo.
Nuevo instrumento
'Es una decisión positiva', señala Mario Berenguer, el presidente de la agrupación de seguros de vida de la patronal Unespa. 'Se creará un nuevo instrumento que complemente las pensiones de la Seguridad Social'. 'Pero además', añade, 'conlleva la ventaja, frente a los planes de pensiones de incluir un seguro de vida', destaca Mario Berenguer.
La mayoría de las compañías tendrán listo el diseño del producto (el plan de previsión asegurado) después del verano con el fin de tenerlo en el mercado a partir de enero, fecha en que entrará en vigor el nuevo IRPF aprobado por el Gobierno.
El plan de previsión asegurado robará mercado a los planes de pensiones. Pero también canibalizará los propios productos de las aseguradoras, tanto los seguros de jubilación como los planes que también comercializan gran parte de las entidades, especialmente las grandes como Caifor, Mapfre, los dos primeros bancos o Allianz.
Si el año pasado, las aseguradoras lograron 120,20 millones de euros con los planes de pensiones de interés garantizado, el sector tiene claro que una parte de este volumen se trasladará a los nuevos seguros clónicos.
La reforma del IRPF constituye un logro para las aseguradoras, después de las persistentes reclamaciones al Ministerio de Hacienda y a la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones. Pero también va a suponer un obstáculo para el desarrollo de otros productos.
El hecho de que anule la tributación por el cambio de un fondo de inversión a otro dañará la evolución de los segurfondos (también llamados unit-linked, o unos seguros de vida que van ligados a fondos de inversión). Hasta ahora su principal ventaja comparativa era precisamente su posibilidad de traspaso sin tener que tributar.
Además, los segurfondos se enfrentan a este nuevo competidor en sus horas más bajas. El año pasado las primas cayeron un 63%, y empujaron el negocio del ramo de vida hacia abajo -los ingresos por primas cayeron un 3,3%, aunque las provisiones aumentaron el 15,04%-. Para este ejercicio, la evolución depende de que las Bolsas mejoren. Fuentes de las aseguradoras estiman que las primas no van a crecer demasiado este año, aunque las provisiones (el ahorro acumulado) sí deberían hacerlo.
Uno de los aspectos que han quedado fuera de la reforma del IRPF, que también era reclamado por las aseguradoras, es mejorar el tratamiento fiscal de los seguros y planes que se rescatan en forma de renta (en pagos periódicos) en vez de como capital (de una vez).
'Es lógico pensar que el tratamiento debería ser como mínimo como el del capital' (que cuenta con deducciones), afirma Mario Berenguer. Fuentes de las aseguradoras apuntan que el cambio para la tributación de percepción en renta podría incluirse en la tramitación parlamentaria de la ley del nuevo IRPF.