EE UU exige a Sharon que retire sus tropas de los territorios ocupados
El presidente George Bush anunció ayer que el secretario de Estado estadounidense, Colin Powell, viajará a Oriente Próximo la semana que viene y ha pedido a Israel que comience a retirar sus tropas de los territorios ocupados. A pesar del ataque a la basílica de la Natividad y la entrada de sus soldados en la ciudad de Hebrón, el Gobierno de Ariel Sharon permitía que el enviado de Washington, Anthony Zinni, se entrevistara con Yasir Arafat en su cautiverio de Ramala. A pesar de la petición de Bush, el primer ministro israelí aseguró que continuará su ofensiva contra el ¢terrorismo¢. Fracaso de Solana y Piqué en sus gestiones en Jerusalén.
Pocas horas después de que el secretario de Justicia británico, Jack Straw, advirtiera que Oriente Próximo se encuentra ¢al borde de la catástrofe¢, Bush se dirigió a los estadounidenses para anunciar que ha decidido intervenir en la crisis regional.
En un discurso en el que no se ha privado de culpar a Arafat de la situación en la que se encuentra, el presidente de Estados Unidos ha pedido el fin de la violencia y el inicio de una ¢era de paz¢ que permita el establecimiento de un Estado palestino junto al de Israel. Para ello, Bush ha conminado a Arafat y a los países árabes a condenar a quienes se convierten en bombas humanas contra la población israelí. ¢No hay mártires, hay asesinos¢, afirmó Bush. En este sentido consideró que ¢en los últimos siete días, (Israel) ha actuado para sacar a los terroristas de sus nidos¢. Y agregó, en un claro apoyo a la invasión israelí de la última semana, que ¢Estados Unidos reconoce el derecho de Israel a defenderse del terror¢.
Sin embargo, y ¢como un comprometido amigo de Israel¢, el presidente estadounidense pidió a Sharon que comience la retirada de sus tropas de los territorios ocupados estos días, así como el respeto de las resoluciones 242 y 338 de las Naciones Unidas. Asimismo, Bush dijo que Israel debe frenar la instalación de colonos en los territorios ocupados, si bien no precisó qué ocurrirá con aquellos que ya están establecidos.
No hubo reacción inmediata de parte de Arafat. Pero Sharon, quien permitió a Zinni que se reúna con el líder palestino, advirtió que las operaciones militares continuarán.
Como si corroboraran sus palabras con hechos, los soldados israelíes entraron ayer en Hebrón, con lo cual ya son siete las ciudades cisjordanas ocupadas. Y se advierte que se preparan incursiones en zonas rurales palestinas. En Belén, las tropas israelíes derribaron ayer la puerta trasera de la basílica de la Natividad, según los frailes que están sitiados junto con 200 palestinos armados. Los ocupantes de la iglesia se trasladaron a un convento contiguo, mientras Sharon negaba el hecho y afirmaba que no entrarán a la sagrada basílica. Ya son 1.100 los detenidos palestinos en la última semana y no hay cifras claras de muertos, ya que el bloqueo israelí a los periodistas es completo.
La Organización para la Cooperación y la Seguridad de Europa (OSCE) denunció ayer los ataques de los militares israelíes contra periodistas estadounidenses, europeos y árabes, y condenó estos hechos.
Sin embargo, las reacciones internacionales no parecen hacer mella en el Gobierno de Sharon. Ayer, los enviados especiales de la Unión Europea, Javier Solana y el ministro de Exteriores español, Josep Piqué, regresaron a Bruselas y a Madrid tras sufrir un brutal desaire de las autoridades israelíes, que les comunicaron que no podían reunirse con Arafat porque continúa ¢aislado¢. Tras permanecer menos de medio día en Jerusalén, los enviados europeos del más alto nivel, regresaron con las manos vacías y sin haber podido aportar soluciones a la crisis. Anoche, el presidente José María Aznar daba su apoyo a las propuestas de Bush.
El precio del petróleo cae tras la intervención de la Casa Blanca en la crisis
Los precios del crudo en el mercado de Nueva York descendió a sus mínimos en siete semanas, después de que el presidente George Bush pidiera la retirada de las tropas israelíes de Cisjordania y anunciara el envío a Oriente Próximo de su secretario de Estado, Colin Powell.
El crudo para entregar en mayo cayó 81 centavos, equivalente al 2,9%, hasta 26,75 dólares el barril en el New York Mercantile Exchange, su mayor desplome desde el 12 de febrero. A comienzos de la jornada de ayer, el crudo cotizaba a 28,35 dólares el barril, su nivel más alto desde el 18 de septiembre. Mientras tanto, el brent, cuyas negociaciones concluyeron poco antes de la alocución de Bush, finalizó casi sin variaciones respecto de su precio del miércoles.
¢El panorama ha dado un giro¢, dijo Tim Evan, analista de IFR Pegasus en Nueva York. ¢Esto reduce la posibilidad de un embargo árabe para forzar a Estados Unidos a tomar una posición de este tipo¢. Por su parte, Kuwait, el sexto productor de petróleo de la OPEP, dijo que no reducirá su producción.