La acusación modifica las sanciones propuestas contra Microsoft en el juicio antimonopolio
Los nueve estados que acusan a Microsoft por prácticas de monopolio han modificado las sanciones propuestas después de que se denunciara que podrían crear confusión en la industria informática.
Representantes de esa acusación han señalado que los cambios propuestos dejan claro que no se exigirá a Microsoft vender versiones diferentes de su sistema operativo.
El fiscal general del estado de Connecticut, Richard Blumenthal, dijo que, a cambio, el gigante informático tendría que vender una sola versión modular de Windows, del cual podrían extraerse aplicaciones como los buscadores de Internet, los dispositivos de medios y los "mensajeros instantáneos".
Blumenthal afirmó que con esas modificaciones se pondrá fin a "la retórica exagerada y las predicciones apocalípticas" de Microsoft.
Los cambios formulados por los estados fueron anunciados después de que Microsoft y el Departamento de Justicia llevaran a cabo "ajustes" a su propuesta de solución del caso con el fin de neutralizar críticas de que ésta tiene resquicios legales que podrían ser aprovechados por la empresa.
Esa solución ya ha sido aceptada por nueve de los 18 estados que comenzaron la demanda contra Microsoft, a la que se acusaron de llevar a cabo prácticas de monopolio que no sólo han perjudicado a la competencia sino también a los consumidores.
La juez Colleen Killar-Kotelly iniciará el miércoles próximo una serie de audiencias sobre el caso en las cuales deberá determinar si el acuerdo propuesto beneficia a los consumidores.
Otras audiencias sobre las sanciones mismas se iniciarán el lunes de la próxima semana.
Ballmer cree que las demandas de la acusación destruirían a Windows
El presidente ejecutivo de Microsoft, Steve Ballmer, ha expresado su temor a que la empresa tendría que retirar del mercado su sistema operativo Windows si la justicia de su país le impone las duras sanciones que persiguen los nueve estados de Estados Unidos que forman la acusación.
El mes pasado, al ser cuestionado por un abogado que representa a los estados, Ballmer sostuvo que las estrictas sanciones que proponen algunos estados crearían el caos entre los consumidores y en el sector de la computación, al requerir a Microsoft que ofrezca miles de versiones distintas de Windows.
Ballmer cree también que las sanciones propuestas por los estados podrían costarle miles de millones de dólares y "erosionar" el valor del principal producto de Microsoft al permitir a los competidores que "clonen" el sistema operativo.
"La propuesta... de los estados sería un decreto que yo no sabría cómo cumplir", dijo Ballmer en una transcripción de 143 páginas de la declaración difundida por Microsoft.
"Realmente pienso que tendríamos que retirar al producto Windows del mercado", agregó.
Los abogados de los nueve estados, conjunto que incluye a California, Massachusetts, Iowa y onnecticut, interrogaron a Ballmer el 8 de febrero en preparación para las audiencias sobre las sanciones que deberían imponerse sobre la compañía para evitar futuras violaciones antimonopolios.