Las Bolsas pliegan velas por el 'efecto Enron' y a la espera de Greenspan

Las Bolsas del mundo vivieron ayer una jornada errática, falta de pulso, con volúmenes de negocio cortos y, ante todo, expectantes por lo que hoy decida la Reserva Federal. Las cifras de actividad en ese país están marcadas por las contradicciones. Son buenas las últimas, pero peores de lo que se dijo las anteriores. Las revisiones sólo crean confusión.

Wall Street sigue moviendo ficha. En Europa es la gran referencia. Los mercados europeos evolucionaron con indiferencia hasta la apertura y posterior periodo de coincidencia operativa con las Bolsas. Fue decisiva la inclinación bajista de éstos para que las Eurobolsas siguieran la misma dirección.

Los expertos manejaron varias razones para explicar la retirada de los inversores de las Bolsas. Primero, por la preocupación a que surjan otros casos como el de Enron. Willians, que comercializa energía, ha retrasado la publicación de resultados, lo que ha hecho sospechar al mercado. En relación a Tyco también han surgido rumores que cuestionan la veracidad de su contabilidad.

Segundo, la ambigüedad de las cifras económicas que se publican en Estados Unidos. Las de ayer, referidas a los pedidos de bienes duraderos y a la confianza de los consumidores, fueron buenas, incluso mejor de lo esperado, pero la contabilidad estatal advirtió de que las publicadas el mes anterior eran, en realidad, peor de lo que se dijo.

Tercero, la recomendación de los expertos de permanecer al margen hasta que hoy se conozca el análisis que haga el Comité Abierto de la Reserva Federal sobre la economía estadounidense y a la decisión que tome sobre los tipos de interés. Las Bolsas, no obstante, apuestan por un mantenimiento del precio del dinero después del optimismo que arrojó de Alan Greenspan en el discurso que realizó a finales de la semana pasada.

Otro foco de atención para los inversores se encontraba en el discurso que pronunció George Bush anoche, con los mercados europeos cerrados, sobre el estado de la nación.

Y todos estos temores hicieron caer a Europa en el último tramo de la jornada. El Ibex se dejó un 1,14%, con un volumen de negocio ligeramente por encima al de la víspera (1.729 millones de euros). A falta de dos jornadas para que finalice enero, el Ibex acumula una caída del 2,61%.

También registraron pérdidas el Dax (1,44%), el Mib-30 (0,78%), Cac (1,43%) y Footsie (1,77%).

El pesimismo se instaló en Wall Street desde el inicio, a pesar de que no faltaron algunas noticias empresariales positivas. Texas Instruments, por ejemplo, presentó unos resultados mejores de lo esperado por el consenso de los analistas.

Peter Boockvar, operador en Miller Tabak, comentaba ayer que el centro de atención está en los indicadores económicos que se conocerán esta semana. La gente sabe que la Reserva Federal ya terminó con su política de recorte de las tasas y que la crisis de la economía estadounidense probablemente ya tocó fondo, pero ¿a qué ritmo comenzaremos a recuperarnos?'.

José Luis Martínez, de Citigroup, opina, en lo que se refiere a bienes duraderos, que 'se trata de crecimientos que entraban dentro de las previsiones, pero en la parte baja', mientras que la encuesta de consumo desveló favorables expectativas para el futuro sobre una base aún poco sólida.

La contratación de acciones cayó un 4% en 2001

 

 

Los mercados españoles de renta fija y variable negociaron durante el año 2001 valores por importe de 501.764,83 millones de euros (83,48 billones de pesetas), lo que representa un 5,86% menos que en el ejercicio anterior, según un informe de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La mayoría de esta negociación, el 88,85%, correspondió a renta variable, un porcentaje inferior casi cuatro puntos al ejercicio anterior, mientras que la mala situación bursátil impulsó la contratación de renta fija, que supuso en 2001 el 11,15% de la negociación total, frente al 7,485% el año anterior.

 

 

 

 

 

 

 

En el apartado de renta variable, las operaciones ascendieron a 444.301,75 millones de euros (73,92 billones de pesetas) y de éstas, un total de 440.604,84 millones de euros (73,31 billones de pesetas) se negoció en el Sistema de Interconexión Bursátil, lo que representa un descenso del 9,88% respecto al ejercicio anterior.

 

 

 

 

 

 

 

Un total de 3.672,04 millones de euros (610.976,05 millones de pesetas) se realizó mediante el sistema de corros. La contratación a través de este sistema registró un incremento en 2001 del 8,69%, mientras que en el segundo mercado el volumen de negocio ascendió a 24,86 millones de euros (4.136,36 millones de pesetas), un 35,76% más que en 2000.

 

 

 

 

 

 

 

La negociación de títulos del Nuevo Mercado, en el que se agrupan las compañías tecnológicas, descendió a más de la mitad y supuso 24.971,39 millones de euros (4,15 billones de pesetas).