Euronext integra la Bolsa portuguesa mes y medio después de comprar Liffe
En el juego de las fusiones entre Bolsas europeas, hay un participante que siempre gana. Euronext, mercado que resultó de la fusión de París, Bruselas y Ámsterdam, anunció ayer los términos de su fusión con la Bolsa de Lisboa y Oporto. Hace poco más de un mes había cerrado la compra del mercado de derivados británico Liffe.
Con la integración de la Bolsa de Valores de Lisboa y Oporto, Euronext cierra un capítulo más de su imparable ascenso. El mercado, promovido por la Bolsa de París, que integró a Ámsterdam y Bruselas, nació a la sombra de iX, proyecto de las Bolsas británica y alemana. Ahora iX es sólo un recuerdo, mientras Euronext no sólo ha concretado la carta de intenciones firmada con el mercado portugués, sino que también ha comprado el mercado británico de derivados iX.
Los actuales propietarios de la Bolsa portuguesa recibirán 0,81 acciones de Euronext más 5,83 euros en efectivo por cada título de la Bolsa de Lisboa y Oporto. Según estos términos, los accionistas de la Bolsa portuguesa tendrán un 4% del capital de la futura Euronext. El desembolso en efectivo será de 35 millones de euros (5.800 millones de pesetas).
La Bolsa de Valores de Lisboa y Oporto no sólo es el parqué de renta variable lisboeta. También agrupa al mercado de derivados (localizado en Oporto) y la cámara de compensación. Esto es, un mercado totalmente integrado y coherente con la estrategia de Euronext.
El proyecto incluyó desde un principio la integración de Bolsa de valores, sistema de compensación y liquidación y mercado de futuros. Es más, Euronext se expandió en su rama más débil, la negociación de derivados, comprando a principios de noviembre el mercado británico Liffe. Además, la cámara de compensación que utiliza, Euroclear, pretende una fusión con Clearstream, propiedad de la Bolsa alemana.
Fusión anunciada
Euronext es, pues, el jugador más hábil en la partida por hacerse con los mercados financieros europeos. Aunque la fusión con Lisboa y Oporto era sólo cuestión de tiempo desde que, a mediados de junio de este año, ambas partes firmasen un protocolo de intenciones que incluía las intenciones de fusionarse.
El mercado salió a Bolsa en julio de este año, valorado en 2.800 millones de euros (466.000 millones de pesetas). Su evolución bursátil no ha sido tan brillante, pues ha tenido que desembolsar 902 millones de euros (150.000 millones de pesetas) para poder hacerse con Liffe. Así, las acciones de Euronext han retrocedido un 18% sobre el precio al que fueron vendidas al público.