_
_
_
_

Teorías de todo tipo sobre el efecto económico de los ataques

Hay quien dijo que las catástrofes reactivan la economía. De igual modo que las crisis industriales reconvierten las fábricas, la recuperación de los desastres crea infraestructuras más eficientes. Y la reconstrucción crea empleo. Los analistas no creen que éste sea el caso en EE UU. Pero tampoco tienen claro los efectos reales del ataque sobre la economía.

Lo único cierto es que, por el momento, la política fiscal y monetaria se ha vuelto más expansiva que nunca. Sus efectos, no obstante, se desconocen. Aparte de reconstruir Manhattan y de ayudar a los afectados, la parte del león del aumento del gasto irá destinado al aparato militar de EE UU y a incrementar la seguridad.

La seguridad implica trabas para hacer negocios. Además, presumiblemente las empresas se verán obligadas a invertir más en seguridad, una inversión que no implica beneficio futuro. Por eso, según algunos expertos, la productividad bajará.

Adiós al superávit

Asimismo, el superávit presupuestario de la era Clinton ha terminado. EE UU se podía permitir hasta este año recomprar deuda, lo que tiró a la baja de los tipos y estimuló la financiación privada.

Pero el impacto más grave puede venir del lado del consumo. Las semanas posteriores a los ataques los estadounidenses se quedaron en casa. Las calles, cafés y centros comerciales estaban tan vacíos que los alcaldes de Nueva York y Miami piden a la población que consuma.

La parálisis del gasto sería dramática en una economía consumista. Aunque hay analistas que aseguran que, con los ataques, la recesión será más profunda, pero se tocará antes suelo y la recuperación será más rápida.

Archivado En

_
_