Las empresas paralizan la toma de decisiones sobre el alquiler de oficinas
La incertidumbre económica ha llevado a numerosas compañías que habían demandado nuevas superficies de oficinas a retrasar su toma de decisiones. La consecuencia inmediata ha sido el descenso en la contratación de metros cuadrados y el estancamiento en los precios, salvo en el distrito de negocios de Madrid.
El mercado de oficinas ha acusado en el primer trimestre del año el retraimiento de las empresas a la hora de tomar sus decisiones de alquiler o prealquiler de inmuebles, influenciadas por la situación temporal de incertidumbre económica internacional. La consecuencia inmediata de este retraso en las decisiones ha sido una menor contratación de oficinas y un estancamiento en precios, salvo en el distrito de negocio de Madrid, en el que la escasez de oferta permite alquilar de inmediato los pocos metros cuadrados que salen al mercado. La subida en el distrito de negocios ha sido en estros tres meses del 8%, situándose el precio de los alquileres en 6.500 pesetas al mes por metro cuadrado.
Pedro de Churruca, consejero director general de la consultora inmobiliaria Jones Lang LaSalle, considera que, a pesar de lo sucedido en los tres primeros meses del año, las cifras de contratación se están recuperando en este mes de abril. "Los precios seguirán subiendo este año, aunque moderadamente, incluso el año que viene", afirma.
La mayor contratación de oficinas que se espera a partir de este mes no permitirá alcanzar los niveles del año pasado, aunque sí podrían acercarse a los de 1999, estiman en Jones Lang Lasalle.
Al igual que en Madrid, el mercado de oficinas de Barcelona se ha caracterizado por una disminución de la contratación y una estabilidad en los precios de los alquileres. El mercado barcelonés, como el madrileño, ha recibido el impacto de la caída del sector de telecomunicaciones y nuevas tecnologías, que el año pasado concentró un 40% de la demanda total. En el primer trimestre del presente ejercicio este porcentaje se ha reducido hasta el 10%. "Además, hay que tener en cuenta que este tipo de clientes realizan operaciones muy grandes, con lo que aún se nota más una reducción de la demanda", explicó el consejero delegado de Jones Lang LaSalle, Andrés Escarpenter. "Las empresas no han abandonado proyectos, sencillamente han retrasado la decisión entres dos y tres meses", argumentó Escarpenter.
La consultora internacional considera que esta situación ya ha empezado a variar y estima que el mercado se reactivará en los dos últimos trimestres de este año.
Incluso a nivel de precios, ya se ha notado una reactivación este mes de abril, con alguna operación cerrada a 4.200 pesetas el metro cuadrado. En Jones Lang LaSalle estiman que este año se podría firmar en Barcelona alguna operación de alquiler a 4.500 pesetas el metro cuadrado.
Inversiones
El mercado de inversión se ha caracterizado en el primer trimestre por una mayor tranquilidad, un repunte de las rentabilidades en Madrid y una consolidación del mercado español más como un mercado atractivo para los inversores de cara a diversificar sus carteras que como un mercado oportunista. Los inversores estudian con más detalle las ofertas de compra en su ánimo de conseguir rentabilidades más acordes con las rentas vigentes. En Madrid, los inversores están muy prudentes frente a los inmuebles demasiado caros. Para Marcus Lemli, director de Inversión Internacional de Jones Lang LaSalle, "es una señal evidente de que nos encontramos en un proceso de normalización que empieza a dejar de lado la euforia compradora de años anteriores, en los que se ofrecían rentabilidades muy bajas que anticipaban las subidas de rentas".
Barcelona, en cambio, continúa siendo, según Jones Lang LaSalle, un mercado muy interesante para los inversores, pues tiene mayor recorrido en las rentas.
La consecuencia de todo esto es que las rentabilidades continúan su tendencia de alzas moderadas. En los mejores edificios del distrito de negocios madrileño se sitúan entre el 5,50% y el 6% (dependiendo de si el inmueble está alquilado a rentas máximas o no). En los buenos edificios de la mejor zona de Barcelona las rentabilidades se sitúan en el 5,75%.