Koipe reserva 25.000 millones para compras en el extranjero
Koipe centra su objetivo para el ejercicio 2001 en crecer en el extranjero. El consejero delegado de la compañía, Antonio Herranz, afirma que dispone en tesorería de 25.000 millones para adquirir una empresa o marca en el exterior sin necesidad de recurrir a deuda.
Antonio Herranz, consejero delegado del grupo Koipe, asegura que la estrategia de crecimiento de la empresa en España no es hoy el objetivo principal. "Tenemos una cuota de mercado del 30% en España y representamos el 20% de las exportaciones nacionales de aceite de oliva", dice para afirmar a continuación que países como Argentina, Brasil, Japón, México o Francia son mercados y productores emergentes de aceite de oliva.
Herranz avanzó además que, pese a que la estrategia de la aceitera vasca pasa por consolidar sus principales marcas (Koipe y Carbonell en aceites de oliva o Koipesol en girasol), la compañía piensa comprar este año una empresa o marca aceitera en el extranjero. "Tenemos para ello una tesorería con 25.000 millones de pesetas que nos permitirá invertir sin recurrir a financiación externa y, si la necesitamos, tenemos una capacidad de endeudamiento muy grande", si bien dijo que el abanico de posibilidades para dicha inversión abarca desde los 2.000 millones a 20.000 millones de pesetas.
Se da la circunstancia de que Herranz acaba de llegar de Brasil, lugar en el que se encontraba cuando la compañía dio a conocer sus resultados del ejercicio de 2001.
Sobre la caída del beneficio neto de la compañía (un 50% al situarse en 2.144 millones de pesetas), Herranz argumentó que se debe, sobre todo, a una carga tributaria especial por créditos fiscales. Hizo hincapié en que, frente a esos datos, los beneficios de explotación de la compañía habían crecido un 52%, hasta 3.253 millones, lo que en su opinión certifica la buena marcha del negocio de venta de aceite de oliva.
La caída de cotización de los títulos de Koipe en Bolsa (un 24% este año, desde los máximos alcanzados en marzo de 2000) es explicada por Herranz con dos razonamientos: el primero es que "no es estrictamente necesario que el accionista apoye a la compañía para que ésta vaya bien". La Bolsa, según Herranz, sigue un camino propio del que no se sustrae el valor aceitero. Por otro lado, el consejero delegado de la firma cree que impacta en el comportamiento bursátil de la empresa el hecho de que sólo cotiza un 20% en el parqué, mientras que grandes grupos controlan partes importantes de la misma.
Poco interés por Coosur
La compañía justificó en su política de consolidación de las marcas propias y en su estrategia de crecer en el extranjero el escaso interés que tiene por adquirir la aceitera pública Coosur, en proceso de venta por parte de la SEPI. "Aunque escucharemos cualquier opción complementaria", apostilla para no descartar posibles condiciones especiales de adquisición.
Koipe alcanzó una cifra de negocios de 79.953 millones de pesetas el pasado ejercicio y cuenta con cuatro plantas industriales que emplean a 740 personas. El accionariado está controlado por Eridania Beghin-Say (del grupo Montedison) con el 51,24% del capital. Cinco cajas de ahorros andaluzas tienen más del 17% de las acciones de la aceitera.