Un viejo malware regresa a Android y es imposible de eliminar
Una cuarta parte de los dispositivos de todo el mundo, en riesgo.
Uno de los grandes problemas que aquejan a la seguridad de Android es que existe tal fragmentación en el mercado que es imposible proteger a todos los usuarios a la vez, ya que las marcas apenas garantizan un par de años de actualizaciones de su sistema operativo. Si a eso sumamos que todavía existe un porcentaje muy elevado de móviles o tablets que mantienen en funcionamiento versiones 5 o anteriores, el panorama es desolador.
El problema ahora ha vuelto a la actualidad porque una firma de análisis de este tipo de riesgos en dispositivos móviles, Dr. Web, ha publicado un informe en el que recuerda que una vieja amenaza de Android sigue latente en muchos terminales con el OS de Google. Se trata del malware llamado Android.Xiny.5260, que se propaga a través de aplicaciones que nos descargamos de lugares poco fiables y que se queda almacenado en el dispositivo y es imposible de eliminar.
El problema es que, aunque borremos la aplicación con la que nos infectamos, esos archivos quedan latentes dentro de la memoria del teléfono sin que el usuario sepa dónde encontrarlos y, por tanto, pueda borrarlos. Además, se da la circunstancia de que esa amenaza está dirigida a todos los dispositivos que tengan una versión de Android 5.1 o anterior.
¿Y qué hace? Pues se encarga de instalar sin nuestro permiso –y conocimiento– decenas de aplicaciones, lo que sirve a los hackers para inflar artificialmente el número de usuarios de esas apps para ingresar un dinero que les llega directamente de los desarrolladores. Además, ese trabajo de instalación consume tantos recursos que reduce drásticamente el rendimiento del smartphone.
Cientos de millones de dispositivos amenazados
Dr. Web ha calculado cuántos dispositivos con Android 5.1 –o anterior– podrían estar ahora mismo en peligro en todo el mundo y han llegado a la conclusión de que se trata de 500 millones. Eso significa un 25% del total de móviles, tablets o cualquier otro dispositivo que tenga el OS de Google en sus tripas, lo que no parece mucho... pero lo es.
Debéis tener en cuenta que, ahora mismo, un 13,7% de los terminales con Android tienen la versión 5 instalada y un 12,4 la 4. Por suerte, todos los que estén por encima de esas builds pueden respirar tranquilos porque ese agujero de seguridad está cerrado del todo. Eso sí, para los que están en riesgo el problema no es pequeño porque, como antes os decíamos, es prácticamente imposible de eliminar una vez que nos infecta.
Y decimos lo de prácticamente porque existe una sola manra de acabar con él: reinstalando una nueva ROM encima de la que tenemos ahora mismo. Eso supone un borrado completo del teléfono por lo que, antes de hacerlo, verificad que contáis con una copia de seguridad como respaldo para recuperarla y dejar las cosas como estaban.