Las claves del día: pequeñas novedades en el frente entre BBVA y Sabadell, y el horror cósmico en las redes sociales
Movimientos en una contienda que se prevé larga y en la que aún tienen cosas que decir varios actores importantes
Las opas hostiles son vistas desde fuera como operaciones frenéticas de alta tensión, pero tienen más de guerra de trincheras que de operación relámpago. El último avance del frente –si la economía se presta a los símiles bélicos, las opas se dejan especialmente– ha sido una reformulación de las condiciones de la oferta para contrarrestar un movimiento defensivo de Banco Sabadell. Los de Carlos Torres han visto que los de Josep Oliu podían dificultar la operación mediante recompras de acciones, obstaculizando así que la entidad de origen vizcaíno alcanzase el mínimo exigible de acciones recogido en su oferta. Así que han cambiado las condiciones para que todos esos títulos en autocartera no cuenten a la hora de calcular el éxito de la ofensiva.
Pequeños movimientos en una contienda que se prevé larga y en la que aún tienen cosas que decir varios actores importantes. Con todo, la mejor defensa, más allá de anuncios y de recompras, es convencer al accionariado de que hay más valor en volar solo. Por lo pronto, Sabadell salió el viernes airosa en Bolsa (por poco) tras esta pequeña novedad en el frente.
Es el vecino el que elige al alcalde y es el alcalde el que se sube el sueldo
“Es el vecino el que elige al alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde [sic]”, dijo en 2015 el por entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una de sus atemporales declaraciones. También es el alcalde el que, con la conveniencia de sus concejales, se sube el sueldo. Y muchos lo elevan más que a los funcionarios de su consistorio: uno de cada tres ayuntamientos lo hizo en 2023. Más de 2.000 municipios de España aumentaron en el año electoral la retribución de sus máximos responsables por encima del 3,5%, la referencia que marcó el alza de los trabajadores públicos.
A por los 100 millones...y a por la productividad
Los 100 millones de visitantes en un año y la desestacionalización del sector son dos sueños recurrentes del turismo. El primero tiene todas las papeletas de cumplirse este año, a la vista de las buenas cifras del pasado, y al segundo le quedan unos cuantos años de cambio climático, pero acabará llegando. Que el turismo funcione bien no deja de ser buenas noticias para esa economía española que lidera la zona euro en crecimiento y que es laureada por The Economist. Ahora bien: el buen desempeño de la gallina no debe hacernos pasar por alto que sus huevos oro parecen, pero son más bien plata. Y ni eso. La coyuntura global exige que, a menos que España quiera convertirse definitivamente en un parque de atracciones, mejore su productividad. Y solo con el turismo no vale.
La frase del día
No queremos ser daneses, no queremos ser estadounidenses, queremos ser groenlandeses. El statu quo no es una opciónMúte Egede, primer ministro de Groenlandia
El ‘ahorrismo’ en las redes sociales y el horror cósmico
Mark Zuckerberg tiene un parecido físico más que razonable con el escritor de terror y ciencia ficción H. P. Lovecraft, especialista en el horror cósmico. Muchos expertos consideran que la etapa que inicia Meta, reduciendo la moderación y dejando a los usuarios que se supervisen entre ellos, será algo parecido a ese horror cósmico, al potenciar el odio y el acoso.
Irónicamente, el modelo colaborativo y horizontal es el que ha dado lugar a herramientas como la Wikipedia, que, sin embargo, ha sido atacada por Elon Musk, partidario a su vez de que X no tenga moderación jerárquica. Una cosa está clara: dejar tareas en manos de los internautas es mucho más barato que tener que contratar a gente dedicada a hacerlas. Ante la duda, el ahorrismo suele tener las de ganar.