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A fondo
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Por qué las empresas deben replantearse su localización

Ciudades de la Península Ibérica como Madrid, Lisboa y Barcelona ofrecen un ecosistema digital óptimo

Centro de datos.
Centro de datos.picture alliance (dpa/picture alliance via Getty I)

Los costes de producción, las cadenas de suministro y el acceso al talento o la tributación son algunas de las razones para reevaluar la estrategia de localización de una empresa. En la era digital, el posicionamiento geográfico se ha vuelto aún más crítico, debido a que la velocidad de intercambio de datos entre la empresa y las redes externas depende de la conexión a una infraestructura digital de alto rendimiento.

El crecimiento continuo de los nuevos hubs digitales está ofreciendo a las empresas mayor posibilidad de elección de localización, así como de redundancia. En este sentido, la Península Ibérica destaca como una localización atractiva para las empresas. Las compañías europeas y las compañías globales que quieren tener presencia europea han tendido a congregarse en grandes hubs digitales como Fráncfort, Londres, Ámsterdam y París (los conocidos como mercados FLAP) para tener acceso a sus ecosistemas. Ahora, ciudades como Madrid, Lisboa y Barcelona, ofrecen ventajas económicas e infraestructurales, con un ecosistema digital que incluye hubs de datos, servicios en la nube y alta conectividad, combinados con los servicios de interconexión de una serie de puntos de Intercambio de Internet (IX), para ofrecer unas condiciones óptimas para el trabajo y la vida digitales.

Actualmente, Iberia puede considerarse prácticamente el hub del mundo digital. Situada a orillas del Atlántico y el Mediterráneo, la región cuenta con infraestructuras de cable submarino que conectan los cinco continentes con una latencia imbatible. La península reúne 35 sistemas internacionales de cable submarino y 20 estaciones de aterrizaje de cable (CLS). Esto permite optimizar los flujos de tráfico global, con Iberia bien situada como vía alternativa para el tráfico internacional de datos de norte a sur, de sur a sur y de este a oeste.

Además de su papel en los flujos globales de datos, Iberia es un mercado interesante por derecho propio, con una población cercana a los 60 millones de habitantes y niveles líderes en despliegue de 5G. La península alberga un mercado de hubs de datos distribuidos que comprende más de 100 hubs de datos y unos cuantos más en planificación, con conectividad terrestre que atraviesa Iberia y la conecta con el resto de Europa. La buena salud de la enseñanza superior garantiza la captación de nuevos talentos para satisfacer la gran demanda mundial de trabajadores cualificados, y el clima y el estilo de vida contribuyen a la retención de ese talento. La península alberga una extensa red de trenes de alta velocidad, así como múltiples puertos marítimos. Es un megahub regional, no solo para los flujos de datos, sino para todas las necesidades empresariales.

Los proveedores de servicios en la nube hace tiempo que conocieron el atractivo de la Península Ibérica, con enormes inversiones en la región en los últimos años y anuncios de inversiones multimillonarias de nuevo en 2024. Si nos fijamos solo en Madrid, podemos ver por qué los proveedores de la nube han sentido la necesidad de instalarse en la región: la capital de España alberga las sedes de la mayoría de las grandes empresas españolas, ya que el 65% de las multinacionales del país tienen su base central en la ciudad, junto con más de 7.000 empresas extranjeras. La ciudad es una de las cinco primeras de Europa con más sedes operativas de empresas multinacionales del Fortune Global 500. Desde 2016, Madrid ha experimentado un notable crecimiento, del 23,24% de su PIB, hasta alcanzar los 261.700 millones de euros en 2023.

El ‘megahub’ regional

¿Qué tiene la Península Ibérica que la hace tan única? No solo tiene una centralidad mundial para los cables submarinos, sino que también cuenta con infraestructuras muy distribuidas. Junto con los hubs de Madrid, Lisboa y Barcelona, otros mercados de infraestructuras que también desempeñan su propio papel en la formación del megahub regional ibérico son Bilbao, Valencia, Málaga, la región de Aragón, Oporto y Sines. La combinación de los puntos fuertes de este dinámico clúster de hubs y mercados de infraestructuras hace que Iberia encabece la lista de todas las empresas que buscan una nueva ubicación para sus sedes y sucursales.

La Península Ibérica cuenta ya con 13 puntos de intercambio de internet, principalmente en Madrid, Lisboa y Barcelona, que optimizan los flujos de tráfico y facilitan la conexión con redes locales, regionales e internacionales.

En resumen, las empresas se están trasladando a la Península Ibérica aprovechando las ventajas que ofrece. La Península Ibérica es única en el mundo por sus infraestructuras y las ventajas asociadas a su posición geográfica. Para las empresas que buscan una mayor eficiencia, controlar sus flujos de datos globales y garantizar la resiliencia de la conectividad, Iberia debería ocupar un lugar de honor en la lista de ubicaciones clave en sus estrategias de localización europeas y globales.

Theresa Bobis es directora regional para el sur de Europa de DE-CIX


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