Héctor Grisi, continuismo útil en Santander ante las turbulencias
Su planteamiento exigirá mucha gestión y poner énfasis en la operativa del día a día
Héctor Grisi cumple 100 días como consejero delegado de Santander. Su llegada, escrutada por mil ojos tras la fallida contratación de Andrea Orcel para el cargo y el periodo de transición auspiciado por José Antonio Álvarez, ha tenido el inicial logro de escenificarse como un aterrizaje más que suave, hasta apacible. De hecho, el perfil del ejecutivo ha ayudado a enmarcar el relevo dentro de unos principios de normalidad y continuismo, más necesarios que nunca tras el indeseado ruido judicial provocado por el fichaje interruptus del banquero transalpino y en un momento de serias turbulencias tras los problemas en EE UU y el caso Credit Suisse.
En ese contexto, su discurso inicial, dejando claro que no viene a tocar el modelo de negocio ni la estrategia, sino a acelerarlos, encaja sin estridencias en una entidad que conoce bien. Su primer trimestre, de hecho, ha sido ajetreado. Alentada por los tipos de interés, la entidad se anotaba beneficios récord de 9.605 millones de euros en 2022, un 18% más que el año anterior, y por encima incluso de los conspicuos registros previos a Lehman Brothers. Casi en paralelo, el banco presentaba en su Día del Inversor un plan de crecimiento a tres años con los objetivos de incrementar el payout (porcentaje del beneficio que se destina a retribuir al accionista) del 40% al 50% y lograr un retorno sobre el capital tangible (ROTE) del 15% al 17%.
En tanto el planteamiento para llegar a esos hitos no supone un gran plan de transformación, sino un mecanismo para aprovechar en lo posible el viento de cola de los tipos, sí exigirá mucha gestión y poner énfasis en la operativa del día a día. Así se trasluce de que alguno de los pilares del plan pase por situar al cliente en el centro del negocio, alentar la venta cruzada de productos y propiciar mayor contribución de la red. En este sentido, que Grisi se haya esforzado por trasladar el mensaje de hablar claro y cuidar al cliente es la mejor de las noticias para la entidad.
El resto de los vectores, centrados en la simplificación y la automatización, suponen el principal reto para el mexicano. Crear una gran plataforma que unifique los productos y dé servicio a todas las divisiones geográficas debería estar en el centro de ese esfuerzo como principal dinamo para el ahorro de costes. También genera curiosidad el futuro de PagoNext, la plataforma de pagos del banco, con un ambicioso proyecto por desarrollar mientras el resto de las entidades han desintermediado esos procesos. Buenas y prometedoras bases, en suma, para un arduo proyecto.
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