Los españoles disparan las aportaciones a fondos de inversión, pero el 99% es en productos de bajo riesgo
Las suscripciones hasta noviembre son las más altas en 11 años, con 31.000 millones, pero concentradas en monetarios y renta fija pese al tirón de las Bolsas

Los fondistas prefieren la seguridad a la rentabilidad potencial. El dinero nuevo que ha entrado en los fondos de inversión españoles suma en lo que va de año 31.034 millones de euros, la mayor cifra en 11 ejercicios, según los datos publicados hoy por Inverco, la asociación del sector. Y el 99% de ese dinero fue a carteras de activos monetarios (deuda a ultracorto plazo) o de renta fija.
El Ibex 35 cotiza en máximos históricos con una rentabilidad al igual que la mayoría de los principales índices europeos y de Estados Unidos. Pero no lo hace por el dinero que llega de los fondos de inversión. Al menos, no de los españoles. Las estadísticas de Inverco revelan que la mayor parte de los inversores en estos productos ha optado por los especímenes más conservadores. Los de renta fija han atraído 29.466 millones entre enero y noviembre, y los monetarios (con carteras de deuda y depósitos de una duración media que suele situarse en los seis meses), 1.556 millones de euros.
Los que toman las decisiones discrepan de los que hacen las predicciones, puesto que desde Bestinver señalaron el pasado 20 de noviembre en su XXIV Conferencia Anual de Inversores que “los mercados se encuentran en zona de máximos históricos por motivos sólidos”. Y apuntó con el dedo a la moderación de lapolítica arancelaria de Estados Unidos, a su aparente entente con China, al control de la inflación, al plan de estímulo en Europa, a la solvencia de las familias y empresas, y a la fortaleza de los beneficios empresariales.
El patrimonio total sigue acercándose al medio billón de euros, con un total de 446.469 millones, lo que supone un crecimiento en lo que va de año del 11,7%. Además de los fondos mencionados, otras categorías que experimentaron importantes crecimientos fueron las de renta fija mixta (5.088 millones) y de retorno absoluto (1.539 millones). En cambio, salió dinero de los fondos globales (-639 millones), de los de renta variable internacional (-1.203 millones), de los de Bolsa española (-180 millones), de los garantizados (-2.514 millones) y de los rentabilidad objetivo (-2.088 millones).
El mes pasado, los fondos de inversión captaron más de 2.710 millones, de manera que son ya 61 meses consecutivos de suscripciones netas positivas. La entrada de dinero se ha logrado, pese a la volatilidad de los mercados ante el riesgo a una burbuja impulsada por la Inteligencia Artificial, aunque es cierto que los mercados bursátiles cerraron el mes con rentabilidades ligeramente positivas, tanto en los americanos como en los europeos. El Ibex 35 sube más de un 41% en lo que va de año.
Andbank señala a sus clientes de banca privada en un informe que “si realmente nos encontramos en un punto de inflexión en el crecimiento de los beneficios, como sugiere el mercado, para lograr ganancias de dos dígitos sería necesaria una mejora generalizada en todos los sectores”. Así, en ese escenario la entidad ve una oportunidad atractiva para rotar hacia sectores cíclicos rezagados y áreas infravaloradas, como los productos básicos de consumo y los farmacéuticos. “Si, como esperamos, los beneficios no alcanzan estas previsiones optimistas, estos sectores deberían mantenerse relativamente bien, dadas las expectativas ya pesimistas incorporadas en sus valoraciones”, agregan.
Todas las categorías de fondos exhiben rentabilidades positivas en 2025, con un 4,24% de media. Desde el 1,73% de los monetarios hasta el 39% de los fondos de renta variable nacional, pasando por el 18,4% de las carteras índice y el 9% de la renta variable internacional. Cierto es que noviembre fue un mal mes. Todas las categorías perdieron dinero, salvo la de los fondos monetarios, que sea anotó un 0,1%. Los fondos de renta variable internacional fueron los que más registraron una pérdida del 1,6%.
La llegada de dinero hacia fondos de perfil conservador ha sido masiva en los tres últimos años. Tras la debacle de 2022, donde este tipo de fondos sufrió mucho, los bancos pusieron en marcha toda su maquinaria comercial para atraer a la clientela, al calor de las subidas de tipos. Primero fueron los fondos con un objetivo de rentabilidad, luego fue la resurrección de los fondos garantizados, y ahora está llegando el dinero a fondos activos de renta fija, donde sus gestores tratan de buscar las mejores oportunidades en el ámbito de los bonos.

