SAP consolida su liderazgo como la empresa más valiosa en Europa pese a unos resultados algo por debajo de lo previsto
La firma alemana presenta un sólido crecimiento en la nube, pero el euro fuerte frena sus cuentas
Un día antes de que Tesla y Alphabet inauguren la temporada de resultados de las grandes tecnológicas, la alemana SAP ha presentado sus cuentas trimestrales. Con una capitalización de 320.630 millones de euros, la firma de software se consolida como la empresa más valiosa de la Bolsa europea. A pesar de mantener el trono, el valor en Bolsa de la tecnológica europea está lejos de los cuatro billones de gigantes como Nvidia.
SAP registró unos ingresos por servicios en la nube y software de 7.970 millones de euros en el trimestre finalizado el 30 de junio, un 11% más que el año anterior, aunque ligeramente por debajo de las previsiones del consenso de Bloomberg (7.990 millones). Los ingresos en la nube crecieron un 24%, un ritmo robusto, pero que muestra señales de desaceleración. En los tres primeros meses del año, esta partida aumentó un 27%. De cara a los próximos meses, las perspectivas continúan siendo positivas, aunque inferiores a lo inicialmente esperado. La cartera de pedidos en la nube, un indicador clave de futuras ventas, alcanzó los 18.100 millones de euros, también por debajo de los 18.500 millones estimados por los analistas.
Mientras las grandes cotizadas estadounidenses se benefician de la debilidad del dólar, la fortaleza del euro actúa como un lastre para las europeas. SAP mantiene su previsión anual de ingresos en la nube, pero advierte de que las fluctuaciones de divisas restarán 3,5 puntos porcentuales al crecimiento previsto. Su mayor mercado es Estados Unidos, que representa más del 30% de sus ventas, y el efecto del tipo de cambio ya se está dejando sentir en sus cuentas.
“A medida que entramos en la segunda mitad del año, mantenemos un optimismo prudente, vigilando de cerca la evolución geopolítica y las tendencias del sector público”, señaló la empresa en un comunicado. La dirección mantuvo sin cambios sus previsiones y espera que a cierre del ejercicio el beneficio operativo (ebitda) se sitúe entre la horquilla de los 10.300 millones y los 10.600 millones de euros, tal y como se esperaba a comienzos de año.
Conocida por sus soluciones de software para la gestión empresarial —finanzas, recursos humanos o compras—, SAP no ha querido permanecer al margen de la corriente que impera entre las grandes tecnológicas y ha intensificado en los últimos años su apuesta por la inteligencia artificial. Además de sumarse a la ola del nuevo internet, la compañía trabaja para acelerar la migración de sus clientes desde servidores locales hacia infraestructuras en la nube. A pesar de la incertidumbre geopolítica y los temores sobre los aranceles, la empresa sigue registrando un crecimiento robusto. Los procesos de migración a la nube suelen implicar proyectos complejos y compromisos a largo plazo, difíciles de suspender una vez iniciados.
En lo que va de año, sus acciones se revalorizan casi un 10%, ampliando la distancia con el fabricante holandés de maquinaria para chips, ASML, que ha perdido más de un 11% en Bolsa. Unas caídas se han visto intensificadas en las últimas sesiones tras advertir que podría no mantener su ritmo de crecimiento en 2026. El retroceso de ASML ha permitido a la francesa Hermès, fabricante de los icónicos bolsos Birkin, escalar hasta la segunda posición entre las cotizadas más valiosas del Viejo Continente.
