El BCE vigila de cerca la evolución de los precios del petróleo
El economista jefe no espera unos tipos por debajo del 2% sin una importante recesión
Los últimos datos de inflación ya lo confirmaron: el repunte de los precios energéticos es uno de los principales obstáculos para que los bancos centrales alcancen el ansiado objetivo de una inflación en el 2%. En una reunión con los ministros de finanzas de la zona euro, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, señaló que la institución analiza con detalle la evolución del precio del petróleo para detectar cualquier conflicto inflacionario.
La guerra entre Israel y Hamás ha disparado los precios del crudo y el gas natural. El temor de posibles problemas de suministro como los experimentados en enfrentamientos anteriores llevó a muchos a especular con la posibilidad de que el crudo se disparara a los 100 dólares. En las últimas proyecciones el BCE apuntaba que la inflación no alcanzaría el 2% hasta 2025. Las estimaciones se realizaron tomando como base un petróleo en los 82,7 dólares para este año y en los 77,9 dólares en 2025. Es decir, lejos de los 90 dólares que ha llegado a superar en las últimas jornadas.
La semana pasada, Francois Villeroy, miembro del consejo de gobierno, destacó que estaban atentos al impacto de los precios en la inflación. Villeroy intentó bajar la intensidad y señaló que la inflación aún continuaba en tendencia bajista y que la clave será si el conflicto se expande.
El economista jefe de la institución, Philip Lane, ha apuntado en una entrevista con el diario holandés Het Financieele Dagbla, que si los shocks de inflación son lo suficientemente grandes o persistentes, tendrán que estar abiertos a hacer más. Lane, uno de los miembros más moderados de la institución, señaló que mantendrán las tasas altas el tiempo que sea necesario. “Solo cuando tengamos la suficiente confianza en alcanzar ese objetivo podremos normalizar la política. Pero esto está bastante lejos de donde nos encontramos ahora”, remarcó. Antes de dar por concluida la batalla contra la inflación considera que se necesitan conocer los acuerdos salarias para 2024, algo que no sucederá hasta la primavera de 2024.
El economista jefe no espera que la inflación vuelva a los niveles prepandemia, un periodo en el que las principales instituciones monetarias luchaban para evitar la deflación. Lane señala que los estudios reflejan que una vez superada la inflación, los tipos probablemente volverán a situarse en torno al 2%. “No nos quedaremos donde estamos ahora para siempre, pero tampoco podemos imaginar ningún escenario en el que bajemos muy por debajo del 2% sin una recesión importante”, remarca.
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