La CNMV velará por que la banca aclare al cliente la rentabilidad de los fondos superventas

Buenaventura pone al ‘ecopostureo’ en el centro de su vigilancia

Rodrigo Buenaventura, presidente de la CNMV.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) quiere proteger a toda costa a los pequeños inversores y ha emprendido la tarea de lograr que los bancos sean más transparentes en la comercialización de los fondos de inversión más vendidos en los últimos meses y que clarifiquen qué rentabilidad pueden ofrecer a vencimiento. El supervisor del mercado español tiene en consulta pública una guía técnica sobre los fondos de renta fija con estrategia de comprar y mantener. Una decisión que llega después de que durante 2022 –año en el que tanto la renta variable como la renta fija registraron fuertes pérdidas– se registraran 32 fondos de inversión con ese perfil y otros 41 con un objetivo concreto de rentabilidad. El objetivo de la CNMV pasa porque las entidades aporten más transparencia y comuniquen al cliente que puede llegar a sufrir pérdidas.

El presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, reconoció ayer que “no está preocupado” sobre cómo se están comercializando este tipo de vehículos, dado que ya se han ido incluyendo las advertencias precisas pero que aspira a “hacerlas más claras y específicas”. Así, puntualizó posteriormente que sí está atento a si los bancos están dando a conocer bien a los pequeños inversores qué rentabilidades pagan este tipo de vehículos que, en ocasiones, no están incluidas en los folletos y que son comunicadas a través de otros documentos posteriores o correos electrónicos.

El supervisor del mercado español presentó ayer las líneas estratégicas de su actuación para este año y 2024. La CNMV quiere acelerar en este periodo la supervisión rigurosa de los mercados de valores con especial atención a la estabilidad financiera. Asimismo, aspira a fortalecer el marco de protección de los inversores minoristas para evitar que caigan en “esquemas fraudulentos y combatir prácticas inadecuadas como el greenwashing” o ‘ecopostureo’. Con ello, velará porque el diseño y venta de productos y servicios de inversión eviten posibles conflictos de interés y expliquen “de modo realista sus características como, por ejemplo, los factores ESG incorporados a los productos”. De esta forma, busca poner el foco en los productos con características ESG u objetivos de inversión sostenible, dado que, apunta, “puede implicar el riesgo de que este valor no se materialice o que sea de difícil identificación para el inversor, sobre todo el minorista”.

La CNMV quiere además revitalizar los mercados de capitales para favorecer el crecimiento y la transición a una economía sostenible y aspira a monitorizar los efectos de la innovación financiera y tecnológica en los mercados de valores.

Para todo ello, el supervisor se ha fijado un total de 48 iniciativas, entre las que se incluye la creación de una unidad de prevención de blanqueo de capitales, agilizar los procesos de autorización para fondos de capital riesgo y analizar si las cotizadas están reflejando bien el impacto de la subida de la inflación y el cambio de ciclo de los tipos de interés.

Asimismo, ejecutará un análisis sobre la transparencia del Ibex 35 frente a otros índices europeos y mundiales sobre su metodología de cálculo y la inclusión y exclusión de valores. Buenventura avanzó además que espera realizar otro estudio similar sobre el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF).

Otro de los puntos en los que se centrará el regulador este año será la monotorización de las contribuciones de las entidades de crédito españolas al cálculo del euríbor. El presidente de la CNMV descartó que haya un “problema subyacente” en estas colaboraciones y avanzó que con este trabajo buscan “mejorar las herramientas de seguimiento”.

Las salidas a Bolsa, a la espera de estabilidad en el mercado

Después de varios años de turbulencias en los mercados que han casi paralizado las salidas a Bolsa, el presidente de la CNMV optó ayer por la cautela y no avanzó sus previsiones para este ejercicio sobre colocaciones en el parqué. Buenaventura apuntó que, cuando la estabilidad vuelva al parqué, es de esperar que los emisores se planteen la opción de debutar en Bolsa. Una situación que en el mercado no se espera que se produzca antes de la segunda mitad de año. La última salida a Bolsa fue la de OPDE en julio del año pasado, si bien redujo a la mitad el dinero captado vía ampliación de capital.

Buenaventura reconoció que la inestabilidad del mercado ha provocado una rebaja en las valoraciones de las empresas y no descartó que repunten las operaciones corporativas, como la anunciada esta misma semana sobre el supermercado de fondos Allfunds, que pese a ser español cotiza en Ámsterdam.

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