CIAM- CIAR, CEIA y el Ministerio de Asuntos Exteriores se alían para promover el uso del español en los arbitrajes internacionales
Las tres instituciones suscriben un Manifiesto por el Uso del Español en el Arbitraje Internacional. La lengua de Cervantes se habla en menos del 10% de los procedimientos entre países iberoamericanos
El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, el Centro Internacional de Arbitraje de Madrid-Centro Iberoamericano de Arbitraje (CIAM–CIAR) y el Club Español e Iberoamericano del Arbitraje (CEIA) han suscrito un manifiesto para promover el español como lengua en procedimientos arbitrales, especialmente en aquellos que involucren a partes iberoamericanas. El documento se ha suscrito en el marco del Congreso Internacional La lengua española y el derecho internacional organizado por la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España.
Este manifiesto servirá como plataforma para que instituciones, juristas y entidades puedan adherirse y contribuir a la expansión del uso del español en el arbitraje internacional. Las tres instituciones se encargarán de promoverlo. Para ello han habilitado una dirección de correo electrónico y un formulario específico para poder tramitar todas las adhesiones. En el documento se recuerda que “los abogados se encuentran en una posición privilegiada para fomentar el español como lengua del arbitraje en procedimientos que involucren partes iberoamericanas. Así, en la medida en que actúen en nombre propio o representen partes iberoamericanas en contratos internacionales o procedimientos arbitrales y el uso del español resulte conveniente para los intereses de sus clientes, deberían utilizar nuestro idioma”.
Uso minoritario
En el ámbito empresarial iberoamericano, el español desempeña un papel vital en el comercio global, con un crecimiento continuo en los flujos de capital y exportaciones Sur-Sur y Sur-Norte. Sin embargo, según el manifiesto, “a pesar de que alrededor del 20% de las partes en arbitrajes comerciales o de inversión son iberoamericanas, menos del 10% de dichos procedimientos se llevan a cabo en español”.
El director general del Español en el Mundo, Guillermo Escribano, ha enfatizado el papel del español como lengua global, como segunda lengua materna del mundo, con casi 500 millones de hablantes, y su creciente peso en las relaciones internacionales y en la economía mundial. Ha asegurado que el arbitraje ha abierto un campo de desarrollo, expansión y estudio para el Ministerio de Exteriores que “apoya y promueve la lengua española como vehículo esencial de negociación y divulgación científica y económica, con especial incidencia en el sector jurídico internacional”.
Por su parte, José María Alonso, presidente de CIAM-CIAR ha subrayado que, al promover el español como idioma en los procedimientos de arbitraje, los abogados garantizarán una representación efectiva de sus clientes y contribuirán a la eficacia del arbitraje internacional como método de resolución de disputas. “Es conveniente recordarlo a los prescriptores de las cláusulas arbitrales cuando estén negociando la misma y cuando tenga sentido incluir el español como idioma del arbitraje”, ha añadido.
Alfonso Iglesia, presidente del Club Español e Iberoamericano del Arbitraje, ha destacado que la comunidad arbitral iberoamericana ha ido tomando conciencia de la importancia del uso del español en los procedimientos arbitrales en los que intervienen partes iberoamericanas para la mejor defensa de sus intereses, y que el español es ya la segunda lengua más utilizada en el arbitraje internacional. Con la firma del Manifiesto buscamos seguir incrementando el uso de la lenga española.