Más inversión de riesgo y presencia femenina para asegurar el futuro del emprendimiento
España sufre de una cultura emprendedora con mucha aversión a los errores a pesar de los instrumentos robustos que ofrece el sistema bancario para la financiación de pymes. Falta impulsar de manera decidida a las emprendedoras, que tan solo han fundado de manera íntegra una de cada diez startups nacionales
El emprendimiento en España presenta dos retos acuciantes: por un lado, permear una cultura emprendedora en la sociedad, y por otro, potenciar la figura femenina en un ecosistema dominado aún por hombres. Tan solo un 10% del total de startups en nuestro país ha sido íntegramente fundada por una mujer, y apenas el 26% cuenta con al menos una en su equipo fundador, según el último Global Entrepeneurship Monitor (GEM) correspondiente al ejercicio 2022-2023.
Para Carmen Herrero, catedrática emérita de Fundamentos del Análisis Económico en la Universidad de Alicante y profesora investigadora del IVIE, aumentar esa cuota “es importante” de cara a la generación de empleo. “Recuperaríamos a una parte muy importante de la población”, explica, que actualmente no está participando en este tipo de actividades.
Entre las razones, el muy interiorizado ADN de la “excesiva aversión al riesgo” que se refleja en la tasa de actividad emprendedora española, situada en el 6% y por debajo de la media europea, según el GEM. Misma visión comparte Nacho Conde, catedrático de análisis económico en la UCM, y subdirector de FEDEA, para quien los “motivos culturales” frenan la iniciativa de lanzarse a la piscina, más en el caso femenino.
La gran palanca es avanzar en promover unos mercados de capitales que sean más amigables a este tipo de inversiones de riesgoSantiago Carbó, catedrático de análisis económico de la Universitat de Valéncia y director de Estudios Financieros de Funcas
No obstante, este rasgo no es el principal para Johanna Gallo, directora general y cofundadora de APLANET. Desde su punto de vista, si bien el perfil debe ser “arriesgado”, también debe tener capacidad de reflexión. “Porque detrás hay un negocio que tiene que crecer, sustentarse sobre unas bases sólidas y crear valor”, comparte junto al grupo de expertos de Foro Futuro, el observatorio de tendencias económicas de CincoDías y Banco Santander que ayer radiografió la situación del emprendimiento en nuestro país y que estuvo moderado por Amanda Mars, directora de CincoDías y de EL PAÍS Economía.
El tejido de empresas emergentes en base a los datos del GEM invita al optimismo. Ya son más de 11.000 y emplean a más de 140.000 personas. Todas sometidas a una regulación más garantista pero que obstaculiza el acceso a la financiación de los proyectos emprendedores. “La regulación financiera no es pro businness”, analiza Santiago Carbó, catedrático de Análisis Económico de la Universitat de Valéncia y director de Estudios Financieros de Funcas.
El emprendimiento en España tiene un problema cultural: no estamos acostumbrados a emprender, y es algo que habría que cambiarCarmen Herrero, catedrática emérita de Fundamentos del Análisis Económico en la Universidad de Alicante y profesora investigadora del IVIE
Para el economista “hay varios problemas” en el entorno europeo: el aparato normativo “penaliza enormemente” ciertos vehículos financieros, en especial los de mayor riesgo. Ni siquiera el sistema bancario, del que todos han coincidido que es robusto y versátil (tras las regulaciones posteriores a la crisis económica de 2008) puede acceder a todos los rincones. Queda patente, pone como ejemplo, en un capital limitado “si no hay un colateral” para participar en los procesos que implican a venture capital o business angels.
Vías como la creación de un sandbox financiero (un procedimiento que favorece la innovación en un entorno controlado por autoridades supervisoras) permitiría, según Carbó, “generar certidumbre en las startups”, además de dar un impulso definitivo al mercado único de capitales. “Esta es la realidad, no tenemos que decir España, tenemos que decir Europa”, corrobora Alicia García-Herrero, economista jefe para Asia Pacífico en Natixis, profesora en la Universidad de Ciencias y Tecnología de Hong Kong e investigadora senior del think tank Bruegel.
El emprendedor debe tener un perfil arriesgado, pero también reflexivo porque detrás hay un negocio que tiene que crecer, sustentarse sobre unas bases sólidas y crear valorJohanna Gallo, directora general y cofundadora de APLANET
La experta considera que la inversión en I+D europea no tiene nada que envidiar a la de China, pero sí detecta que donde falla es en el paso de la investigación básica al mercado “porque no hay tantos venture capital” que dinamicen dicha financiación desde distintos puntos de Europa. En el caso español y en línea con las conclusiones del GEM, ensalza el sistema bancario apuntalado aquí, con “un modelo muy difícil de encontrar en el mundo”, que permite que las pymes estén cubiertas y ofrezca más margen a ciertos instrumentos de financiación desde las entidades.
Ley de Startups
La estrategia del Gobierno, materializada en parte con la reciente Ley de Startups recoge, para García-Herrero, iniciativas “absolutamente necesarias”, como unas mayores deducciones fiscales o la agilización de trámites administrativos. Por su parte, Conde detecta un contrapunto en esta legislación: “en cuanto a financiación, creo que la nueva ley no parece que vaya a mejorarla mucho”.
Pero no solo se trata de financiar para la economista: “hay que pensar cómo desarrollar un mercado de businness angels o de venture capital que por desgracia España no tiene el tamaño de desarrollar. De ahí la necesidad de que esto a la larga sea un proyecto europeo”.
Una de las cuestiones importantes en el emprendimiento es la financiación, y creo que la nueva Ley de Startups no parece que vaya a mejorar mucho ese aspectoNacho Conde, catedrático de análisis económico en la Universidad Complutense de Madrid, y subdirector de FEDEA
La normativa también dedica un apartado a atraer y fidelizar el talento, menciona Herrero, quien enfatiza cómo el empleo que generan las empresas innovadoras es “de alta calidad” al buscar profesionales especializados “y con ciertas características difíciles de mantener y retener”. Si bien no cree que solo eso baste para que se fomente el salto del ámbito investigador o académico a su puesta en el mercado. Es ahí donde ve que faltan más incentivos para que este fenómeno se produzca “de una manera más consistente”.
Carbó refrenda que debe de haber un “esfuerzo” a nivel europeo precisamente por las ventajas que genera el emprendimiento, entre las que destaca el empleo “de calidad”. El horizonte pasa, reflexiona, por accionar “la gran palanca” que serían unos mercados de capitales “más amigables” para acometer inversiones de mayor riesgo.
Resiliencia
APLANET, startup cofundada por Gallo, de la que ahora es directora general, inició su andadura en 2019. Tenían claro, cuenta durante la sesión, que el proyecto tenía que aportar valor “desde el día uno” para optar a la financiación. Más cuando el paradigma del emprendedor español se aleja bastante del que puede haber en los Estados Unidos (EEUU), donde “si se tienen otras redes de apoyo, quizá puedes emprender proyectos con más riesgo”.
Al mismo tiempo, concreta que no es solo llegar a formar una startup cuyo camino, en los primeros meses, suele ser la incertidumbre. En el caso de APLANET, una empresa de base tecnológica, la innovación asociada requiere de “unas bases que la sustenten” y, sobre todo, de resiliencia para que se vean “los frutos a largo plazo”.
Las pymes españolas están muy cubiertas con un mayor margen a cierta financiación bancaria, un modelo muy difícil de encontrar en el resto del mundoAlicia García-Herrero, economista jefe para Asia Pacífico en Natixis, profesora en la Universidad de Ciencias y Tecnología de Hong Kong e investigadora senior del think tank Bruegel
La idea “no es suficiente”, retoma Carbó. “Emprender, crear una startup, requiere aguantar”, porque en el camino del emprendedor aparecerá el desánimo cuando trate de exponer la idea para buscar inversiones, más si son en entornos de riesgo alto.
Por eso celebra experiencias como la de Gallo, quien reconoce que salen a buscar financiación “tanto dentro como fuera de España”. Ante un ecosistema que Carbó define como “muy vivo”, sigue faltando una mayor variedad en los instrumentos a los que acceder.
Una de las gurús dentro del emprendimiento, Deirdre McCloskey, añadía además otra cualidad esencial para estos perfiles: la capacidad de persuasión, a la que también ha aludido Conde. “La condición necesaria para poder emprender, decía ella, es tener ideas que, de primeras, nadie las vea como buenas. McCloskey defendía que si esa idea solo la ves tú, la tienes que defender”.
En su opinión, la ley de startups “no está al nivel” de permitir apostar por las tres características que los expertos mencionan, como son la asunción de riesgos altos, el aprendizaje de los fallos y la resiliencia.
Sectores clave para el futuro del emprendimiento
Renovables. Santiago Carbó, catedrático de Análisis Económico de la Universitat de Valéncia y director de Estudios Financieros de Funcas, define al sector de las energías renovables como “una de las mejores cartas” que tiene España en el escenario europeo. La guerra de Ucrania visibilizó la resistencia de nuestro país, que en los últimos años ha acelerado el camino de la transición energética.
Tecnología. “Creo que estamos subestimando la capacidad de desarrollo que tiene España en tecnología”, advierte Johanna Gallo, directora general y cofundadora de APLANET. Hace referencia tanto a la capacidad de nuestro país en este sector, como a la potencial diversificación que tiene.
Turismo. Los expertos defienden el avance hacia un “turismo de calidad” que, para Alicia García-Herrero, economista jefe para Asia Pacífico en Natixis, profesora en la Universidad de Ciencias y Tecnología de Hong Kong e investigadora senior del think tank Bruegel, podría seguir el camino tailandés: centrado en los cuidados a mayores mediante una sanidad privada “más grande” que aliviaría el impacto sobre el sistema público de salud.
Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días