Tether ficha al exjefe de criptoactivos de la Casa Blanca para su expansión en EE UU
Bo Hines renunció a su cargo a principios de este mes y será el nuevo asesor estratégico de la empresa. La emisora de USDT prevé ofrecer una moneda estable específica para el mercado estadounidense

Tether, el emisor de USDT la primera stablecoins del mundo, ha anunciado este martes el fichaje del exjefe del consejo de criptomonedas de la Casa Blanca, Bo Hines, para liderar su estrategia de expansión en Estados Unidos. Hines renunció a su cargo a principios de este mes y ahora asumirá de inmediato su nuevo rol como asesor estratégico en Tether, con sede en El Salvador, tal y como ha informado la compañía en un comunicado.
Hines, exjugador universitario de football americano que se presentó sin éxito dos veces al Congreso por Carolina del Norte, era relativamente desconocido en los círculos cripto antes de su designación y no tenía experiencia en este mercado. Desde diciembre y hasta que ocupó su cargo, estrechó las relaciones entre la administración republicana y la industria cripto, organizó la primera cumbre cripto del mandato de Trump y avanzó en el desarrollo para implementar una legislación sobre activos digitales en EE UU, que se concluyó con la aprobación en julio del Genius Act, la primera ley sobre stablecoins del país. La normativa, entre otras cosas, obliga a los emisores a respaldar sus tokens uno a uno con activos como bonos del Tesoro estadounidense o dólares y a publicar cada mes el estado de sus reservas.
Tether se ha resistido a cumplir con estos requisitos. De hecho, sus reservas están invertidas en letras del Tesoro y deuda de EE UU pero también en activos de riesgo como bitcoin. Las reservas siempre han sido el talón de Aquiles de la empresa, con sede en El Salvador, que ha tenido varios encontronazos con los reguladores. El más grave en 2021, cuando fue sancionada tras engañar sobre las provisiones que supuestamente respaldaban sus activos: no tenía suficientes dólares y parte de sus reservas eran préstamos y otras criptomonedas. Desde entonces, tiene prohibido operar en el estado de Nueva York y la empresa decidió no seguir con su operativa en EE UU: aunque sus tokens circulan entre lo inversores, la empresa no los vende directamente a clientes estadounidenses.
No obstante, los avances regulatorios y la mayor apertura tanto de la administración como de los reguladores ha convencido a su CEO, Paolo Ardoino, a volver a este mercado: el directivo anunció que la empresa planea lanzar este año una stablecoin dirigida a instituciones en EE UU. En estos meses, además, ha buscado reforzar sus lazos con Washington. Las reservas que respaldan su USDT, con una capitalización de 167.000 millones de dólares, están gestionadas por Cantor Fitzgerald LP, dirigida hasta hace poco por Howard Lutnick, antes de que este fuera nombrado secretario de Comercio por Trump a comienzos de año.
“El nombramiento de Bo demuestra nuestro compromiso en construir una sólida presencia en EE UU que abarque múltiples sectores, comenzando con los activos digitales y ampliándose a nuevas oportunidades”, ha dicho Ardoino en el comunicado. La firma también ha mostrado su interés hacia Europa: la semana pasada anunció que Tether Ventures, el brazo inversor de la compañía, ha adquirido una participación minoritaria del exchange español Bit2Me. Esta inversión representa una puerta de entrada a Europa para la firma que no cuenta con la licencia MiCA ni prevé pedirla.
Este nuevo fichaje llega en un momento de auge del mercado cripto y especialmente de las monedas estables, que valen casi 277.000 millones de dólares. Tether supone un 60% de este mercado y su regreso podría representar una amenaza para Circle, emisor de USDC, la segunda stablecoin del mercado, con un valor de más de 68.000 millones, casi tres veces menos que Tether. La empresa salió a Bolsa a principios de junio y aunque Tether no pretende debutar en Wall Street y seguirá centrada en mercados emergentes, su presencia podría lastrar los resultados de su rival. Ambas, no obstante, deberán competir con la oferta de la gran banca, que planea sumarse a esta carrera.

