Las constructoras cifran en 104.000 millones el reto inversor para paliar las sequías e inundaciones
Seopan presenta un plan de actuaciones a diez años, ofrece fondos privados y reclama un marco de financiación exclusiva para proyectos de agua
El cambio climático y su impacto en España, con prolongados ciclos de sequía y episodios de fuertes lluvias, merece una oleada inversora en infraestructura hidráulica que las mayores constructoras del país, agrupadas en Seopan, cifran en 104.000 millones de euros. El colectivo que preside Julián Núñez ha presentado esta mañana en Madrid un informe jalonado por decenas de proyectos, de los que la atención a la demanda de agua y el cumplimiento de objetivos ambientales se llevan 84.600 millones de inversión. Los otros 19.180 millones se reparten entre actuaciones de adaptación a los eventos climáticos y la reducción de los efectos de las inundaciones. El trabajo, titulado “Estrategia e inversiones para la eficiencia y resiliencia hídrica en España”, lleva la firma de la ingeniería Typsa.
Seopan ha llamado al establecimiento de un marco financiero específico para la ejecución de los planes hidrológicos y de riesgo de inundaciones, que sea “estable y predecible, capaz de movilizar tanto recursos públicos como privados”. Se advierte al mismo tiempo que han de coordinarse los Planes Hidrológicos de tercer ciclo y los Planes de Gestión del Riesgo de Inundación de segundo ciclo, además de precisarse mayor ritmo de inversión pública en gestión de las aguas. El foro en que se han trasladado estas reivindicaciones, organizado por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), ya sirvió el pasado mes de diciembre para que Seopan pidiera el despliegue de 150.000 millones de inversión en infraestructuras de transporte. En esa ocasión también se defendió la colaboración público-privada como vehículo para atender las necesidades en todo el país.
La patronal que engloba a firmas como FCC, Acciona, Sacyr, Ferrovial, ACS y OHLA subraya ahora la falta de desaladoras, plantas de reutilización, acuíferos y sistemas de regadíos por casi 11.000 millones de euros. En el informe también se da detalle de actuaciones por realizarse en entornos urbanos, con obras de saneamiento, depuración, abastecimiento y redes, por más de 59.000 millones. Tanques de tormenta, sistemas de drenaje, adecuación de presas, ampliación de aliviaderos, infraestructuras de defensa, nuevos trasvases y actuaciones en zonas inundables, completan el catálogo remitido a la Administración cuando se cumple un año de las trágicas inundaciones que asolaron parte de la provincia valenciana.
El presidente Julián Núñez ha resaltado que la dana de octubre de 2024 puso a las claras “la urgencia de un enfoque integral sobre la planificación, ejecución y financiación de infraestructuras hidráulicas”. En su análisis, las sequías cada vez más frecuentes “afectan a palancas clave de nuestra competitividad como la agricultura, ganadería y turismo y a las nuevas demandas de agua en la economía global, como la industria de la transformación digital y la industria verde basada en el hidrógeno”.
Tras experiencias fatale en la Comunidad Valenciana o Cataluña, Seopan ha diseñado un programa extraordinario para las cuencas Mediterráneas presupuestado en 4.052 millones. En esta cifra se incluyen obras en las presas de Villamarchante (120 millones de euros), Estubeny (80 millones) y del Marquesado (80 millones de euros), además de la ejecución de una nueva presa del Buseo y la anticipación de la presa de Montesa (100 millones de euros). También se contemplan actuaciones en el barranco del Poyo, la cuenca endorreica del Pla de Quarty, y los barrancos de Saleta, Pozalet y Massanassa, con una inversión conjunta de 424 millones en estos últimos puntos.
Poco ritmo inversor
España, ha vuelto a quejarse Seopan esta mañana, cuenta con bajos niveles de ejecución de inversión pública en políticas de aguas. En el último ciclo, los Planes Hidrológicos de Cuenca no alcanzaron el 30% de ejecución. Por el contrario, en todo el país hay 2,7 millones de personas residiendo en zonas inundables, resalta el estudio, de las que casi medio millón tienen sus hogares en áreas de alto riesgo.
En este contexto de urgencia de obra nueva, el informe de Typsa resalta la oportunidad de incorporar sistemas de conocimiento y monitorización del ciclo del agua mediante tecnologías avanzadas e inteligencia artificial. Del mismo modo, es posible avanzar en el control de consumos y pérdidas. Otra alarma activada, esta referida a los compromisos con la UE, es la del incumplimiento de las Directivas europeas de abastecimiento y saneamiento. Junto al catálogo de proyectos, Seopan ha elaborado un conjunto de propuestas de modificación de la Ley de Aguas “para mejorar la coordinación entre planes hidrológicos, de sequía y de inundaciones”.
Las infraestructuras hidráulicas están sujetas a una planificación hidrológica europea, que deriva de la Directiva Marco del Agua del año 2000. Esta obliga a elaborar planes hidrológicos y de prevención del riesgo de inundación cada seis años. En España, recuerda Seopan, están en vigor los Planes Hidrológicos de tercer ciclo y los Planes de Gestión del Riesgo de Inundación de segundo ciclo (2022-2027), con programas de medidas dotados con 37.938 y 3.312 millones de euros, respectivamente. Su queja reside en la falta de coordinación entre ambos instrumentos, así como en la referida ejecución baja.
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