Hacienda reclama más de 80 millones a Shell por los impuestos a sus beneficios en España
La multinacional anglo-holandesa trata de frenar en los tribunales la liquidación que le exige el fisco tras una inspección sobre el impuesto de sociedades

Hacienda pone la lupa sobre los beneficios de la filial española de Shell, el gigante energético anglo-holandés. La Agencia Tributaria reclama a la compañía más de 80 millones de euros, según consta en varios documentos consultados por este medio.
La compañía está tratando de frenar la liquidación y para ello ha acudido a los tribunales, donde la Audiencia Nacional ha suspendido por ahora el desembolso hasta que se resuelva el litigio.
La propia Shell ya advirtió en sus cuentas de 2024 que se trata de un riesgo “posible”. Este es un estadio contable intermedio entre la provisión, donde el auditor obliga a contabilizar el golpe al considerar que es muy factible que se acabe teniendo que pagar, y el riesgo remoto, donde el supervisor de las cuentas -EY en este caso- no ve riesgo.
Pero desde que se firmaron los resultados, la cuestión ha empeorado. Entonces, Shell estaba a la espera del recurso interpuesto ante el Tribunal Económico-Administrativo Central (TEAC), que el pasado 9 de junio desestimó las pretensiones de la compañía. Ante la derrota en esta instancia administrativa, dependiente del propio Ministerio de Hacienda, la compañía decidió acudir a los tribunales, que por ahora han congelado el pago, según consta en un auto de fecha 8 de octubre de 2025.
El litigio se remonta al 3 de diciembre de 2019, cuando Shell España recibió una notificación procedente de la Agencia Tributaria comunicando el inicio de una inspección de la declaración del ejercicio 2014 correspondiente al impuesto sobre sociedades.
Posteriormente, el 8 de junio de 2021 la sociedad dependiente Shell Spain LNG recibió un acta de inspección fiscal por el impuesto de sociedades de 2014. En ese acta, se propone un ajuste del que resulta una liquidación de más de 80 millones de euros, incluidos los intereses.
La compañía se manifestó en contra de dicha reclamación y firmó un acta en disconformidad el 14 de abril de 2021 y poco después, el 6 de julio, decidió reclamar ante el TEAC, que ahora ha decidido rechazar sus pretensiones.
Para evitar el pago, la compañía presentó los avales bancarios exigidos, al igual que ha requerido ahora la sala de lo contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional. “En opinión de la dirección y de sus asesores fiscales, la sociedad dependiente dispone de argumentos jurídico-técnicos de suficiente entidad como para permitir obtener un fallo favorable, siendo necesario acudir a la jurisdicción contencioso-administrativa”, aseguraba Shell en sus últimas cuentas auditadas. Fuentes de Shell han declinado hacer comentarios.
Todo ello para evitar un pago relevante para la filial de la multinacional con sede en Londres. Shell España perdió más de 26 millones de euros en 2024, según consta en los estados financieros depositados ante el registro mercantil. En 2023, había ganado 45 millones de euros, pero la reversión de activos fiscales llevó a números rojos a la firma el pasado año. Ese año, facturó más de 612 millones de euros y el resultado antes de impuestos fue de casi 14 millones de euros.
Pliega velas en España
Sea como fuere Shell está plegando velas en España. Este mismo año trascendió que la firma ha puesto en venta toda su cartera de renovables, que sumaba proyectos por 3.000 MW en territorio nacional.
Por si esto fuera poco, Shell también ha decidido desmantelar completamente el hub gasista que compró y que tenía su sede para toda Europa en Madrid. Como ya avanzó este medio, la firma lanzó este verano un ERE de extinción sobre la filial nacional de Pavilion Energy, compañía del fondo soberano de Singapur Temasek que compró los contratos gasistas de Iberdrola y que contaba con oficina en Madrid.
Ya en enero de 2025, Shell comunicó sus intenciones de desmantelar la operativa de Pavilion en España, puesto que la compañía ya dispone de plataforma operativa para hacer trading de gas desde otros países.
Por entonces, ya se desveló que, además de por razones operativas, el desmantelamiento de la actividad de Pavilion en España era por razones de optimización fiscal. En este sentido, señalaban que desplegar su actividad de trading desde Dubái o Singapur supone asumir menos carga impositiva que hacerlo desde Madrid.
Shell es una de las mayores petroleras del mundo, solo superada por gigantes estadounidenses como Exxon o Chevron. A nivel global, la multinacional anglo-holandesa registró un beneficio neto en los primeros nueves meses de 2025 de 13.703 millones de euros, casi un 10% menos que el año anterior. En la presentación de la pasada semana, aprovechó para anunciar una recompra de acciones de más de 3.000 millones de euros, lo que permite así retribuir a sus accionistas.
En dicha presentación, Shell informó de que tuvo que hacer frente a un cargo relacionado con el impuesto sobre sus ganancias energéticas del Reino Unido de más de 1.000 millones de euros.

