El Gobierno anuncia 13.600 millones de inversión en las redes de transporte de electricidad hasta 2030
El plan de inversiones supone multiplicar por 14 la capacidad de la red de alta tensión, que gestiona Red Eléctrica, de los 2.000 MW de capacidad a 27.700 MW
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha anunciado este viernes una inversión de 13.590 millones de euros en las redes de transporte de electricidad hasta 2030. La propuesta llega tres días después de que las principales compañías del sector -Iberdrola, Endesa, Naturgy y EDP- advirtieran de que el 83,4% de las redes están saturadas y carecen de capacidad para afrontar los proyectos industriales claves para el futuro de la economía española. El plan del Ejecutivo pretende multiplicar por 14 la capacidad de atender a la demanda en la red de alta tensión: de los 2.000 megavatios de capacidad de la planificación anterior a 27.700.
La planificación presentada por Aagesen para el periodo 2025-2030 tiene como objetivo dar cabida a nuevas conexiones de grandes consumidores. Además, como sostienen desde el Ministerio, cada vez más usuarios quieren conectarse y abastecerse de electricidad en España. Esto se debe, sostienen, a que el país ha acaparado el interés del tejido económico industrial por el bajo precio de la electricidad que proporcionan las renovables. Los centros de datos son el mejor ejemplo. También las nuevas promociones de vivienda.
Hasta ahora, las planificaciones eléctricas se habían centrado en dar respuesta a las solicitudes de acceso para generación, mientras que las demandas de acceso para consumo apenas crecían. Este cambio de paradigma ha dado pie a que el Gobierno eleve los límites de inversión en las redes.
Red Eléctrica, filial de Redeia, tiene limitado su nivel de inversión al 0,065% del PIB. Ese porcentaje se mantiene en la nueva planificación, pero se suma una inyección adicional de 3.600 millones de euros. Con la combinación del crecimiento del PIB y este extra, la inversión pasa de los 8.203 millones previstos en la planificación vigente (2021-2026) a 13.590 millones en el periodo 2025-2030.
El refuerzo no se limita a la red de transporte, también se prevé un aumento de capacidad en la red de distribución, gestionada por las compañías eléctricas, con un incremento de 5,3 GW. A estas empresas se les eleva igualmente el techo de inversión, con 7.700 millones adicionales sobre el 0,13% del PIB que ya tenían asignado.
Al menos un 10% de esos recursos deberá destinarse a mejorar el control de tensión y a sistemas de monitorización que permitan obtener más y mejores datos sobre el estado de la red, una carencia que quedó en evidencia durante el apagón masivo del 28 de abril este año. El Ministerio ha iniciado la audiencia pública del proyecto de Real Decreto que regulará los planes de inversión en redes de transporte y distribución.
“Hoy presentamos un nuevo marco para desarrollar una red eléctrica moderna que nos permita seguir electrificando nuestra economía, una oportunidad país”, ha señalado Aagesen sobre una propuesta que el sector llevaba meses esperando.
Este martes, las principales compañías españolas habían alertado de la situación de colapso que viven actualmente las redes en España. En un comunicado, pedían al departamento que lidera Sara Aagesen poder aumentar la inversión en más redes: “Una vez se disponga de un modelo retributivo que permita invertir, será necesario elevar los límites actuales a la inversión”. Se trata de una histórica reivindicación de las eléctricas a la que, hasta este viernes se había resistido el Gobierno, ya que se trata de un concepto que acaban pagando los consumidores en la factura de la luz.
La propuesta plantea 422 ampliaciones de conexión (142 en la red de transporte para nuevos consumidores, 84 para agentes especiales, como ADIF y puertos, y 196 apoyos a la red de distribución). El plan busca cumplir con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030 (Pniec).
De la nueva demanda, 9 GW se destinarán a proyectos industriales, 13,1 GW a producción de hidrógeno verde, 3,8 GW a centros de datos, 1,8 GW a desarrollos residenciales y 560 megavatios (MW) a la electrificación ferroviaria. Otros 1,2 GW se dedicarán a la electrificación portuaria, con prácticas como abastecer a las embarcaciones desde tierra.
La planificación contempla refuerzos en el 21% de la red de transporte y nuevos ejes de conexión, con especial atención a zonas rurales. Además, prevé la integración de 6,6 GW de hidroeléctrica reversible y estima que los vertidos de renovables al final de la década se limitarán al 3,3 %. El Ejecutivo calcula que cada millón de euros invertido en redes genera un impacto de 1,27 millones en valor añadido bruto y un multiplicador de 20 en la creación de empleo.
