Moeve logra un beneficio de 138 millones de euros en el primer trimestre, un 39% menos por la caída del petróleo
La empresa energética mejora el último tramo de 2024 pero aún sufre los ajustes en el margen de refino
Moeve (antes Cepsa) arranca 2025 con un beneficio neto de 138 millones de euros en el primer trimestre, un 39% menos respecto al mismo periodo de 2024, cuando las ganancias alcanzaron los 226 millones. El ejercicio ha estado marcado por la caída del petróleo que llevó a unos menores márgenes de refino y una mayor volatilidad del mercado, según informa la compañía.
La empresa energética publicó este jueves sus resultados correspondientes a los tres primeros meses del año, en los que registró un ebitda (resultado bruto de explotación) ajustado de 377 millones de euros. Esta cifra supone una caída considerable frente a los 583 millones del mismo periodo del año anterior, afectada, según explica la multinacional, por la contracción de los márgenes de refino y un menor rendimiento del negocio energético. No obstante, el dato representa una ligera mejora frente a los 371 millones del último trimestre de 2024 gracias a unos mejores resultados de sus negocios de Química y ‘Upstream’, junto con la solidez del segmento Energía.
En cuanto al flujo de caja de operaciones —la cantidad de efectivo que una empresa genera o utiliza a través de sus actividades comerciales—, Moeve alcanzó los 338 millones de euros, por encima de los 318 millones registrados en el primer trimestre del año pasado. Las inversiones ascendieron a 222 millones de euros, de los cuales el 62% se destinó a iniciativas vinculadas a la descarbonización y la transición energética.
La deuda neta al cierre del trimestre se situó en 2.399 millones de euros, prácticamente estable frente a los 2.369 millones de finales de 2024. Por su parte, la liquidez ascendió a 5.579 millones de euros, suficiente para cubrir los vencimientos de deuda hasta 2029.
Por divisiones, la de Energía reflejó un ebitda de 288 millones, un 40% inferior al de hace un año, ante una disminución de los márgenes de refino y un menor ratio de utilización de la capacidad de refino. En Química, el ebitda también se redujo un 28%, hasta los 50 millones, con menores ventas y menor demanda, y en Exploración y Producción creció un 3%, hasta los 75 millones.
Maarten Wetselaar, consejero delegado de Moeve, califica los resultados del primer trimestre de 2025 como “sólidos” y apuntilla que sus operaciones financieras estuvieron marcadas por “un contexto de mayor volatilidad del mercado”. “No obstante, nuestros resultados financieros han sido sólidos y hemos seguido avanzando en nuestra estrategia de transformación, avanzando en el despliegue de nuestra red de recarga ultrarrápida y en el suministro de biocombustibles 2G para ayudar a nuestros clientes a avanzar en su descarbonización y acelerar la transición energética en Europa”, afirma Wetselaar.
En octubre de 2024, Moeve anunció su cambio de nombre, abandonando así la histórica marca Cepsa. En este contexto, Wetselaar reafirma en el comunicado de prensa sobre los resultados del primer trimestre de 2025 que la compañía mantiene firme su apuesta y compromiso por liderar la transición hacia una energía y movilidad sostenibles: “Seguimos comprometidos con la transición energética y con garantizar que nuestra experiencia en energía, tecnología e innovación impulse el cambio a largo plazo y acelere la transición hacia una economía baja en carbono”.
Moeve también destaca que en abril obtuvo 304 millones de euros en financiación por parte del Gobierno español para impulsar el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, un proyecto declarado como estratégico dentro del marco del PERTE (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica). Esta adjudicación representa un hito clave en el desarrollo de la estrategia de hidrógeno de la compañía. La iniciativa cuenta con fondos procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea a través del programa NextGenerationEU.
El fondo soberano Mubadala de Abu Dabi - el fondo de esta índole con más activo del mundo en 2024- es la dueña de la energética. Mubadala adquirió una participación significativa en la compañía a través de una alianza con The Carlyle Group, una firma de capital privado global. Esta participación se consolidó en 2021, cuando ambos actores adquirieron el control de Cepsa, que luego rebrandizó a Moeve como parte de su transformación hacia un enfoque más sostenible en el sector energético. Con el respaldo de Mubadala, Moeve ha lanzado varios proyectos sostenibles importantes, como la inversión en hidrógeno verde, biocombustibles y infraestructura energética limpia.