La reactivación global del turismo dispara la reparación de cruceros en los astilleros de Navantia en Cádiz
Acumula 100 embarcaciones en catorce años, de las que 63 han entrado en los últimos cuatro ejercicios. Las estadounidenses Royal Caribbean y Carnival son sus principales clientes.
La reactivación global del turismo no ha pillado a las grandes cruceristas, como Carnival, MSC Cruceros, Costa Cruceros o Royal Caribbean, con los brazos cruzados. Todas las navieras trabajan con una planificación previa mínima de dos o tres años y conscientes de la fuerte recuperación que ya se vislumbraba en el turismo a finales de 2022, tras más de dos años de pandemia, diseñaron el crecimiento de su flota a través de dos vías: la construcción de nuevos buques y la renovación de sus barcos a través de reformas millonarias.
Y de esa última tendencia se han beneficiado los astilleros de Navantia en Cádiz, que han visto cómo la carga de trabajo, el volumen de pedidos y el importe de los mismos se ha disparado desde que en 2011 se inició el negocio de reparaciones de cruceros para reducir el riesgo de depender en exclusiva de la demanda de trabajos ligados a la industria de la defensa, como la construcción o reparación de fragatas, portaaeronaves, submarinos o patrulleros.
Una diversificación que se ha acelerado en los últimos cuatro años, lo que ha supuesto una inyección de actividad económica y empleo fundamental para una provincia especialmente castigada por el desempleo. Los cálculos de la empresa pública estiman que cada reparación de un crucero implica una media de 500 empleos y la participación de más de 30 empresas locales, que sumado a la plantilla de Navantia, representa más de 1,3 millones de horas de trabajo anuales.
Los datos de la Autoridad Portuaria de Cádiz a los que ha tenido acceso este periódico avalan ese giro del negocio. En los 14 años que han transcurrido desde que se empezaron a reparar cruceros, las instalaciones de los astilleros de Cádiz, que reciben apoyo puntual de las de Puerto Real en caso de exceso de trabajo, han reparado más de 100 cruceros de más de 20 compañías internacionales, con un crecimiento exponencial desde la salida de la pandemia. Solo en los últimos cuatro años se ha recibido en los astilleros 63, casi dos terceras partes de las embarcaciones: en 2021 se repararon 18 buques, en 2022 fueron 14, en 2023 llegaron 13 y en 2024 se volvió a tocar techo con 18.
Desde Navantia confirman que para este ejercicio cuentan con reservas de diques para 13 cruceros, a lo que hay que sumar 10 buques ferry. El ranking anual que elabora la revista especializada Marine Benchmark sitúa a la empresa pública como la compañía internacional que más cruceros ha reparado desde la salida de la pandemia.
En el análisis por compañías, los dos principales clientes son las estadounidenses Royal Caribbean y Carnival. Solo en los dos últimos años, Royal Caribbean ha reparado nueve embarcaciones (5 en 2023 y 4 en 2024) en Cádiz y Carnival ha hecho lo mismo con ocho (4 en 2023 y 4 en 2024). Navantia subraya que ambas se han convertido en clientes habituales, “gracias a los acuerdos a largo plazo que hemos desarrollado con ellos según marca nuestra política comercial”. Y una buena prueba de ese compromiso mutuo es que ambas han repetido este año y forman parte de las reservas de las 13 reservas de dique.
El contrato más significativo es el de Royal Caribbean con la reparación integral del Allure of The Seas, que entró en el dique seco el pasado 24 de febrero para una reparación de 42 días, que va a requerir 3.000 trabajadores (500 de Navantia y 2.500 de las distintas subcontratas del gigante estadounidense) y una inversión de 100 millones de euros, y que saldrá el 7 de abril del astillero gaditano para empezar a operar a partir del 12 de abril en Barcelona. Solo cuatro días después de la salida del barco de Royal Caribbean entrará en el mismo dique el Miracle de Carnival. Posteriormente lo harán el Valor el 14 de mayo y el Liberty el 1 de junio.
Otros dos grandes clientes del astillero de Cádiz son la alemana Columbia, que metió a reparar 2 embarcaciones en 2023 y otras 3 en 2024, y la estadounidense Windstar, con un buque en 2023 y otros 2 en 2024. Incluso otra gran crucerista como Costa Cruceros, filial italiana de Carnival, que normalmente realiza sus trabajos de reparación en Italia o en astilleros cercanos al país transalpino, reparó un barco en las instalaciones gaditanas durante el pasado ejercicio.
Ese aumento de la contratación de trabajos de reparación de cruceros tendrá reflejo en la cuenta de resultados de 2024 del astillero público, que se hará oficial en los próximos meses. Un impacto positivo que ya se reflejó en 2023, en el que Navantia cerró con una cifra de negocio de 1.434 millones de euros, un 7% más que en 2022, y una cartera de pedidos acumulada de 8.214 millones de euros, lo que supuso un incremento anual del 11%, tras haber firmado nuevos contratos por importe de 1.746 millones a lo largo de 2023.
De esa última cifra, casi dos tercios de la mayor carga de trabajo procedieron de clientes internacionales, mientras que en el análisis por sectores, la actividad de Defensa aglutinó tres de cada cuatro nuevos encargos. La cartera acumulada en ese ámbito llegó a 7.689 millones de euros, un 94% del total. Con toda seguridad, este último porcentaje bajará en los resultados de 2024 por el importante avance experimentado en la reparación de cruceros, aunque ese incremento podría verse parcialmente diluido por el incremento del gasto militar en toda Europa, acentuado desde la reelección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
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