Indra Espacio nacerá el 1 de julio con 244 empleados y 55 millones en activos
Entre ellos estarán las participaciones en Sateliot e Hisdesat. Fernando García Martínez-Peñalver, actual director de la unidad de negocio aeroespacial, será uno de sus administradores
La filial aeroespacial con la que Indra quiere liderar el sector en España verá la luz el próximo 1 de julio, fecha en la que la compañía tecnológica prevé presentar ante el Registro Mercantil de Madrid la constitución de la nueva sociedad, Indra Espacio. Este será el último paso del proceso iniciado este lunes, con la decisión de su consejo de administración de segregar los activos y pasivos afectos a este negocio y crear la filial, como comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Antes, la junta de accionistas de Indra, pendiente aún de convocar, deberá confirmar la operación, y después tendrá que ser publicada en el Boletín Oficial del Registro Mercantil. Todo ello antes de que acabe el primer semestre, como consta en el calendario indicativo incluido en la documentación que contiene todo el proyecto de segregación, consultada por este periódico. El 1 de julio deberá estar lista Indra Espacio, con un capital social inicial de 845.000 euros y un patrimonio de 28 millones de euros.
Indra traspasará a la nueva filial aeroespacial toda la plantilla que trabaja en esta unidad de negocio. En concreto, 244 empleados, como detalla la misma documentación. Indra Espacio subrogará los contratos de los empleados traspasados, “sin que ello implique cambio o modificación alguna en las actuales condiciones de empleo”, detalla el informe del consejo de administración. “La segregación no producirá ningún cambio en las condiciones de empleo ni en la ubicación de los centros de actividad”, añade el documento.
Uno de ellos será Fernando Martínez-Peñalver, actual director de la unidad de negocio aeroespacial, cargo que ostenta desde principios de este año. Este consta en la documentación como uno de los dos administradores solidarios que tendrá Indra Espacio, junto a Isidoro Jurado Ales, director de control corporativo del grupo.
Activos
Indra Espacio también recibirá todos los activos relacionados con la actividad espacial y satelital que ahora están en el balance de Indra. Estos están valorados en 54,8 millones de euros, repartidos casi a partes iguales entre sus activos corrientes y no corrientes.
En esa cantidad se incluye el valor de las inversiones que Indra mantiene en dos empresas del sector aeroespacial: Sateliot e Hisdesat. De la primera, la compañía que preside Marc Murtra posee en la actualidad 7.174 participaciones, representativas de cerca del 10% de su capital social. Indra valora esta inversión en casi tres millones de euros. Sateliot está especializada en el desarrollo de nanosatélites en órbita baja para servicios de comunicaciones.
Por su parte, la participación en Hisdesat está valorada en el balance de Indra en 7,6 millones de euros. Esta posee 1.262 acciones, equivalentes al 7% de su capital. Hisdesat es un operador de satélites para servicios gubernamentales, especializado en defensa, seguridad, inteligencia y asuntos exteriores. Su principal accionista es Hispasat, con un 43% de los títulos. Esta es uno de los grandes objetivos que tiene Indra para crecer en el ámbito aeroespacial por la vía de las adquisiciones, como confirmó hace unas semanas su consejero delegado, José Vicente de los Mozos.
El activo de Indra Espacio también contará con los 238 proyectos desarrollados por el grupo en el ámbito espacial, y con los cuatro productos tecnológicos que tiene en propiedad: Genius, una herramienta de gestión y mantenimiento de sistemas; Gcore, similar que Genius pero enfocada a la observación de la Tierra; M-DAT, un sistema de gestión de flujos de datos masivos que se descargan de los satélites de observación de la Tierra; y OnEO, una plataforma de explotación de datos de inteligencia geoespacial que aún no está registrada. Indra también participa en siete programas europeos en los que accede a ayudas y subvenciones.
La actividad aeroespacial es una de las claves del plan estratégico elaborado por Indra para el periodo 2024-2030. El objetivo es alcanzar una facturación de 1.000 millones en 2030 y convertirse en el principal dominador de la cadena de valor de este negocio en España.
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