Adif prepara la autopista ferroviaria de Zaragoza a Tarragona y analiza otras siete
Licitará en el arranque de 2024 el proyecto de adaptación de la línea
El Ministerio de Transportes, a través de Adif, busca dar impulso al tráfico de mercancías por ferrocarril acelerando las autopistas ferroviarias. El administrador de la infraestructura ha anunciado la próxima licitación, con un presupuesto superior a los 60 millones, de la redacción de los proyectos para la adaptación de los gálibos de seis túneles y 16 pasos superiores entre Zaragoza y Tarragona. Además, están en análisis otros siete posibles corredores que se sumarían a la corta lista de autopistas ferroviarias por desarrollar, en las que los trenes de mercancías, con vagones adaptados, pueden portar los tráilers y semirremolques, quitando tráfico pesado de las carreteras.
El tramo Zaragoza-Tarragona, presentado durante la jornada ‘Claves del presente y el futuro de las Autopistas Ferroviarias’, estará incluido en el Corredor Mediterráneo y hará posible este tipo de transporte desde Algeciras, Huelva y Vitoria hacia Tarragona y Barcelona. El trazado, a través de Lleida, es de ancho ibérico y tiene la calificación de estratégico por parte de Adif. Se trata de la línea con mayor demanda en toda la red ferroviaria, con un centenar de circulaciones por semana y sentido. Se busca ahora la intermodalidad con la carretera y sinergias con el transporte marítimo.
La empresa que preside Marisa Domínguez ha subrayado que la Zaragoza-Tarragona enlaza los principales nodos de producción y consumo de la Península Ibérica, Madrid y Barcelona, y forma parte de los flujos del centro y sur con el noreste de España y el resto de Europa. El sector logístico ha mostrado interés por el transporte de semirremolques tipo P-400, de carga vertical, en itinerarios que incluyen el citado tramo.
Adif tiene previsto mejorar la interoperabilidad y las prestaciones de la línea, ampliando las vías de apartado hasta una longitud útil de 750 metros en seis estaciones: Selgua, Marcén, Poleñino, Almudévar (las tres de Huesca), Juneda y Raimat (estas dos de Lleida). La inversión será de 25 millones.
Algunos de los datos presentados en defensa del tren de mercancías apuntan que los costes externos de la carretera son siete veces superiores, contaminando hasta cinco veces más en el transporte de mercancías. La pública avanza en la autopista ferroviaria Algeciras-Zaragoza, clave para los tráficos de mercancías entre Europa y Marruecos. En este caso, la redacción de los proyectos para adaptar los gálibos de túneles y pasos superiores a los nuevos tráficos está en su fase final. Además, hay avances en otros cuatro proyectos: Madrid-Valencia, Sevilla-Madrid, Valencia-Badajoz-Entroncamento (Portugal) y Huelva-Madrid.
La oficina de apoyo y asesoramiento para las autopistas ferroviarias, creada en Adif, tiene bajo estudio los volúmenes a transportar, ahorros ambientales, vagones y locomotoras necesarios, así como los planes de negocio e inversiones, en otros puntos de la red. Los itinerarios con potencial son el Azuqueca/Zaragoza-Tarragona; Oporto-Entroncamento-Badajoz Azuqueca; Azuqueca-Valladolid-Burgos-Vitoria; Murcia-Madrid; Tarragona-Barcelona; Tamarite de Litera-Irún/Portbou y Zaragoza-Pamplona (Noain)-Vitoria (Júndiz).
En España se prestan servicios de autopista ferroviaria en ancho estándar desde las terminales de Can Tunis y Morrot, en Barcelona, hacia distintos puntos en el norte de Europa. Además, se analizan proyectos desde Tarragona y su continuidad por el resto del Corredor Mediterráneo en España.
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