Cepyme teme una desaceleración empresarial en España
Cepyme advierte de que el 80% de las pymes no ha trasladado el incremento de los costes a los precios
La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) ha advertido sobre una posible desaceleración en la cifra de negocio de las empresas. Según sus previsiones, esta situación podría agravarse en los próximos meses debido al endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE).
Desde la organización recuerdan que tras un periodo complicado durante 2020 y 2021, las cifras de negocio empresarial reflejaron una “falsa bonanza” causada por la normalización, pero desde la segunda mitad de 2022, según indican, se ha advertido una “acusada desaceleración” en la economía.
Según indican, uno de los sectores más afectados es el comercio. En este ámbito, las cifras de negocio muestran un deterioro provocado por la disminución del gasto en consumo de los hogares a finales de 2022 y principios de 2023.
De acuerdo con el último Barómetro de Cepyme, el 80% de las pequeñas y medianas empresas no ha trasladado completamente el incremento de costes a los precios por temor a una disminución en la demanda. La situación en la industria también es compleja, con un escenario en el que la demanda no responde, evidenciado por el descenso acelerado de nuevos pedidos y una debilitación de la cartera, indican.
El sector servicios, al alza
Por otro lado, el sector servicios ha conseguido un mejor desempeño, impulsado por el turismo internacional, aunque también experimentan una clara desaceleración en su cifra de negocio debido a los altos costes. La encuesta de la Confederación muestra que la facturación de las empresas se ve impactada por el efecto de los precios, lo que explica el mal comportamiento del sector de suministro de energía eléctrica y agua, saneamiento y gestión de residuos.
Desde la organización empresarial señalan que no se debe confundir normalización con bonanza en la economía, y hacen un llamamiento a frenar los costes y avanzar hacia reformas y una mejor fiscalidad. Además, consideran que la complejidad del marco regulatorio también ha perjudicado a la actividad empresarial. “Es crucial tomar medidas para respaldar a las empresas y evitar gravarlas aún más en un momento en que enfrentan desafíos económicos significativos”, añaden.
