El CEO de Volkswagen pide ayuda al Gobierno contra la norma de emisiones Euro 7
Oliver Blume reclama en una reunión con Pedro Sánchez su apoyo para un reglamento europeo "equilibrado" El grupo valora a España como un "hub eléctrico europeo"
El consejero delegado del grupo Volkswagen, Oliver Blume, ha aprovechado su reunión con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al que le ha detallado la inversión de 10.000 millones que la compañía acometerá para electrificar su producción en España, para reclamarle ayuda de cara a la futura entrada en vigor de la normativa europea Euro 7, que implicará fuertes límites a las emisiones contaminantes de los vehículos de combustión.
En concreto, Blume ha solicitado que el Gobierno español apoye la formulación de un reglamento "equilibrado", como también su respaldo a una autonomía europea en materia de energía y suministro de materias primas y componentes, tal y como ha indicado el grupo Volkswagen en un comunicado posterior a la reunión.
El reglamento Euro 7 tiene prevista su entrada en vigor en 2025, y establecerá un límite de emisiones de 60 miligramos de dióxido de nitrógeno por kilómetro para turismos y furgonetas, ya sean gasolina o diésel. Para estos últimos supone un importante recorte de 20 miligramos respecto a los niveles que marca la actual norma Euro 6, lo que ha provocado una fuerte reacción de la industria.
El presidente de Renault, Luca De Meco, explicó la semana pasada que la Euro 7 "tendrá un fuerte impacto en la industria y en los clientes", avisando que los costes relacionados deberán ser repercutidos a estos en el precio final de los vehículos. La norma también obligará, por ejemplo, a garantizar unos estándares de funcionamiento para los componentes del vehículo hasta que el contador del coche marque los 200.000 kilómetros en turismos y furgonetas.
Blume ha trasladado esta petición de apoyo al Gobierno dentro de una reunión centrada en el plan de inversión que, según Volkswagen, "ayudará a transformar España en un hub industrial de la movilidad eléctrica", y a la que también ha asistido la ministra de Industria, Reyes Maroto. "Junto con el Gobierno español, estamos preparados para transformar España en un hub europeo de movilidad eléctrica. El plan de inversiones generará un crecimiento sostenible en España", dice Blume en un comunicado.
Los 10.000 millones de inversión irán destinados a electrificar la producción de las fábricas de Volkswagen en Landaben (Navarra) y Martorell (Barcelona), así como para el ensamblaje y desarrollo de baterías en Sagunto (Valencia). Un programa bautizado como Fast Forward, en el que también participará la empresa de baterías PowerCo, Seat y 49 socios, y que se enmarca dentro del Perte del coche eléctrico.