Cellnex culmina su giro con el cambio de primer ejecutivo antes de lo previsto

Tobías Martínez renuncia por motivos profesionales y personales El consejero delegado adjunto, Àlex Mestre, entre los posibles sustitutos

Infografía: Belén Trincado

El consejero delegado de Cellnex, Tobías Martínez, comunicó ayer, de forma inesperada, su renuncia al cargo, provocando una sacudida al sector de las telecos. El ejecutivo sale de la compañía de forma anticipada, puesto que su contrato terminaba a final de 2024. El directivo ha liderado en los últimos ocho años un grupo que se ha convertido en la principal empresa de infraestructuras de telecos de Europa, tras ejecutar una estrategia de adquisiciones que ha supuesto una inversión de 40.000 millones de euros desde 2015, para alcanzar un parque total de más de 104.000 emplazamientos, al cierre de octubre, repartidos en 12 países.

La salida llega pocas semanas después de la decisión de Cellnex de cerrar su política de agresivas adquisiciones para concentrarse en una estrategia de crecimiento orgánico.

En paralelo con el anuncio de la renuncia, la compañía señaló que su consejo de administración ha puesto en marcha ya los mecanismos necesarios para la sucesión de Tobías Martínez. El órgano de gestión cuenta con ocho independientes de un total de 11 integrantes, con representantes de siete nacionalidades, con una amplia experiencia en telecomunicaciones. Los otros tres consejeros son el propio Martínez, y los dos dominicales; el representante de Edizione, el holding de la familia Benetton, primer accionista con un 8,5% del capital; y el de GIC, el fondo soberano de Singapur, que posee un 7%.

En los próximos meses, los consejeros evaluarán, con la asistencia de un head hunter, los posibles candidatos, tanto internos, como externos. Según fuentes del sector, Àlex Mestre, actual consejero delegado adjunto de Cellnex, será uno de los candidatos a sustituir a Tobías Martínez.

La compañía considera que hay tiempo suficiente para una sustitución ordenada del actual CEO, que estará en el cargo hasta la próxima junta general de accionistas del grupo, que está prevista para el 1 de junio de 2023.

Lo cierto es que la salida de Tobías Martínez ha causado una amplia conmoción en el sector. Para Goldman Sachs, por ejemplo, la sorpresa es “negativa”. Otras fuentes del sector creen que la dimisión ahora no es la mejor manera de convencer al mercado de la actual estrategia. La acción bajó ayer un 2,45%, hasta 31,8 euros, situándose como el segundo peor valor del Ibex.

El grupo sufrió una fuerte penalización en 2022, con una caída del precio de la acción del 39%, eso sí, en línea con otras empresas del sector como American Tower, Crown Castle y SBA Communications. Esta evolución bursátil no habría gustado a alguno de los grandes accionistas de la empresa, al igual que el hecho de que Cellnex se quedase fuera de las transacciones de venta de torres de Deutsche Telekom y Vodafone, en las que salieron vencedores los fondos de inversión. Con esta resolución, además, Cellnex se quedaba fuera de Alemania, el mayor mercado europeo.

El directivo, en cualquier caso, defendió su trayectoria. En una carta, afirmó que la renuncia se trata de una decisión muy reflexionada en la que confluyen diversos factores, profesionales y personales, que de algún modo definen lo que es un nuevo ciclo en la vida de Cellnex, “y que me llevan al convencimiento sobre la necesidad de que éste sea liderado por una persona con un horizonte temporal que vaya más allá de diciembre de 2024, momento en el que finalizaba mi contrato”, dijo Martínez, quien añadió que “no hago sino anticipar unos meses un proceso de transición natural que ya estaba, de por sí, próximo”. Martínez, que va a cumplir 64 años, recordó que son más de 23 años impulsando y liderando los proyectos de Tradia, Retevision, Abertis Telecom y estos últimos ocho años fundacionales de Cellnex. “Años de compromiso con el sector de las telecomunicaciones, acompañando a nuestros clientes en sus proyectos de desarrollo de infraestructuras y facilitando sus despliegues de red. Construyendo un proyecto empresarial con identidad propia y alcance europeo, con un propósito definido de contribuir al progreso y a la activación de oportunidades a través de la digitalización y de la conectividad que ofrecen las infraestructuras de telecomunicaciones”, afirmó Martínez, quien destacó la reputación y el papel que Cellnex juega en las telecomunicaciones europeas.

Nueva etapa

Cellnex se enfrenta ahora a un momento de trascendencia, con una renovada etapa y un nuevo consejero delegado. La compañía, una vez que se cerraron los citados procesos de venta de las torres de Deutsche Telekom y Vodafone, durante el pasado año, optó por dar un giro estratégico. Al no haber sobre la mesa operaciones “transformacionales”, al menos en un periodo de tres o cuatro años, cuando estos fondos busquen salir de estos negocios y maximizar su inversión, Cellnex decidió concentrarse en el crecimiento orgánico.

En la presentación de los resultados del tercer trimestre, Cellnex señaló que abría un nuevo capítulo para adaptar su estructura de capital, con objetivos como el impulso de la generación de caja y la reducción de deuda, en un periodo en el que los tipos de interés están al alza. Las tres prioridades son consolidar grado de inversión en el rating con S&P, impulsar el crecimiento orgánico y maximizar el valor para los accionistas.

Entre otros negocios, Cellnex destacó los proyectos greenfield, con retornos entre el 6% y el 8%, la explotación de nuevos negocios adyacentes a las torres, en la llamada torre aumentada, el avance en los negocios de las redes activas (que ya explota en Polonia), la conexión de las torres con fibra y los centros de datos. Además, tiene planes de densificación de redes en zonas rurales, infraestructuras de transporte y servicios de seguridad; y las redes privadas para el mundo de la industria. En la junta de accionistas del pasado año, el propio Tobías Martínez, dedicó buena parte de su discurso a explicar estos nuevos proyectos.

Cellnex, que tiene una cartera de contratos con operadoras de 110.000 millones de euros, destacó su “sólido crecimiento orgánico” en los nueve primeros meses del año, con un incremento de los puntos de presencia en los emplazamientos del 5,7%.

La empresa, además, confirmó sus previsiones para 2022 y 2025. En ese año prevé unos ingresos entre 4.100 y 4.300 millones de euros, con una tasa anual de crecimiento del 13%; el ebitda, entre 3.300 y 3.500 millones, y el flujo de caja libre recurrente apalancado entre 2.000 y 2.200 millones, con un crecimiento anual del 21%. “Es una empresa muy previsible en sus cuentas”, señalan fuentes del mercado.

Entre otros hitos, el grupo empezará a generar flujo de caja libre positivo a partir de 2024, con el objetivo de superar los 2.500 millones de euros en 2032. Entre 2023 y 2024, Cellnex afrontará fuertes compromisos de inversión en los despliegues de nuevos emplazamientos, incluidos en los contratos con las telecos, vinculados en gran medida al 5G.

Esta fuerte generación de caja contribuirá a un rápido proceso de desapalancamiento. La deuda bruta rondaba a final de septiembre los 18.000 millones, principalmente bonos (en euros, libras, francos suizos o dólares), y otros instrumentos, mientras que la deuda neta es de 17.100 millones. Bajo los planes diseñados por la empresa, en 2030, la deuda ya estaría por debajo de los 10.000 millones, si no hay alguna compra. La firma no necesita hacer refinanciaciones antes de 2024, y contaba, a final de septiembre, con una liquidez de 4.300 millones de euros, 900 millones en caja y 3.400 millones en líneas de crédito sin disponer. El 77% de la deuda es a tipo fijo.

Dividendo

Este desapalancamiento, bajo el grado de inversión, podría llevar a la empresa a elevar el dividendo. Esta remuneración al accionista ha sido simbólica en los últimos años, puesto que la compañía se ha concentrado en el crecimiento.

En el ámbito corporativo Cellnex no descarta posibles operaciones no transformacionales, sobre todo en países donde tiene presencia, para ganar nuevos clientes ancla. Austria o los países de Escandinavia están en las quinielas de los analistas.

Al mismo tiempo, la empresa no se cierra a adquisiciones que contribuyan a mejorar su cartera de productos y servicios, como el proveedor británico tecnologías de conectividad móvil en interiores, Herbert In-Building Wireless, comprada en otoño.

Actividades de la comisión de Nombramientos

Integrantes. La comisión de Nombramientos, Retribuciones y Sostenibilidad de Cellnex está presidida por Marieta del Rivero, Christian Coco, Pierre Blayau, María Luisa Guijarro, Alexandra Reich y Virginia Navarro. Entre sus funciones figura la de examinar y organizar la sucesión del presidente del consejo de administración y del primer ejecutivo de la sociedad y, en su caso, formular propuestas al consejo de administración para que dicha sucesión se produzca de forma ordenada y planificada.

Korn Ferry. Durante 2021, la comisión de Nombramientos, Retribuciones y Sostenibilidad contó con distintos asesores externos, entre los que figuró Korn Ferry para realizar una valoración individualizada de los potenciales sucesores de los puestos clave de la compañía, previstos en el Plan de Sucesión. La Comisión revisó los planes de sucesión y de contingencia del Deputy CEO y sus posibles sucesores internos y debatió la posibilidad de movimientos transversales en la carrera de los miembros de la alta dirección, así como de los ejecutivos del nivel inmediatamente inferior. Además, los miembros de la Comisión solicitaron a Korn Ferry que compartiese el análisis realizado sobre el plan de contingencia de candidatos externos que podrían sustituir al consejero delegado.

Presidente. Además, Korn Ferry llevó a cabo un proceso de sucesión para nombrar al nuevo presidente del consejo de administración, resultando elegido Bertrand Kan, y los nuevos presidentes de las comisiones. También realizó la selección de un nuevo consejero para cubrir la vacante existente en el consejo de administración, que finalizó con el nombramiento de Kate Holgate.