Las subidas de tipos y la inflación restaron intensidad a la economía durante los meses verano

El INE rebaja una décima el alza del PIB en el tercer trimestre, al 0,1%, y eleva al 4,4% la tasa interanual

La economía española experimentó un ligero tropezón en su evolución durante el tercer trimestre. Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el crecimiento del PIB entre los meses de julio y septiembre creció el 0,1% intertrimestral, lo que supone una décima menos que el dato anticipado el 28 de octubre. También contrasta con la cifra del trimestre anterior del 2%, lo que pone de relieve el importante parón de la economía.

El dato refleja ya los efectos de las subidas de tipos por parte del BCE, así como la evolución de los precios que está poniendo coto al consumo de los hogares que apenas creció el 0,1% frente al 1,7% registrando en el segundo trimestre.

El INE ha mejorado por el contrario la tasa de crecimiento interanual y ha elevado en seis décimas el dato avanzado en octubre, desde el 3,8% hasta el 4,4%. Pese a todo, este 4,4% supone una reducción severa respecto al 7,6% registrado en el trimestre anterior.

Las familias gastan menos ante las consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania. En términos interanuales, el gasto de los hogares registra un crecimiento del 1,4%, dos puntos menos que en el trimestre anterior.

El dato conocido ayer lo que viene a reflejar es como el consumo final, se ha sostenidos gracias al empuje del gasto público que ha pasado de una tendencia descendente desde el último trimestre de 2021 a aumentar el 1,4% en el tercero de este ejercicio, tras haber bajado en la misma cuantía en el segundo.

Otro dato que no hace otra cosa que elevar la preocupación respecto al que pudiera ser el cierre de año y ver si finalmente pudiera plasmarse un registro negativo, es el de la evolución de la inversión empresarial, medida en formación bruta de capital. Tras el importante desplome de los tres primeros meses del año del 5,1%, ya en el segundo volvió a tasas positivas del 1,2%, por lo que el parón en el tercero al detener su ritmo hasta el 0,7%.

Cae un 0,6% la inversión en vivienda, un sector que se ha visto castigado por el incremento de los precios de los materiales, tras el importante aumento del 7,3% del segundo trimestre.

En cuanto a la evolución del mercado de trabajo, el dato conocido pone de relieve como el número de horas efectivamente trabajadas caen el 0,1% intertrimestral, 1,2 puntos menos que en el trimestre anterior. En términos interanuales, el número de horas efectivamente trabajadas crece por el contrario el 3,3%, cifra similar a la del trimestre anterior.

La tasa de variación interanual de las horas trabajadas en las ramas industriales se sitúa en el 4,5%, 4,4 puntos más que en el trimestre precedente.

Las exportaciones de bienes y servicios crecen el 18,8% respecto al tercer trimestre de 2021, lo que supone 4,9 puntos menos que en el trimestre anterior. Por su parte, las importaciones crecen un 9% respecto al mismo trimestre del año anterior, tres décimas más que en el segundo trimestre.

El Banco de España precisamente esta semana mostraba unas previsiones algo menos pesimistas para el cierre del ejercicio respecto a las presentadas en octubre. Para este año estimaba que el crecimiento sería del 4,6%, una décima más y prácticamente descartaba que la economía española pudiese entrar en recesión, algo que no era lo previsto en octubre.

Si entonces estimaba que en el último trimestre el PIB podría registrar una leve tasa negativa, que se prolongaría para los primeros meses de 2023, ahora baraja un crecimiento en linea con el tercero, del 0,1% intertrimestral. Sin embargo su estimación no está exenta de incertidumbre y así afirmaba que el riesgo existe, aunque en menor medida que en otras estimaciones. Empeoró sus estimaciones para 2023 y 2024 hasta el 1,3% y 2,7% respectivamente.