Twitter congela las cuentas de acciones de los empleados de cara a sellar el acuerdo con Musk
Ambas partes tienen como fecha límite el 28 de octubre para cerrar la adquisición
Twitter va de puntillas en su cruzada por formalizar el acuerdo de compra por parte de Elon Musk. La tecnológica ha congelado desde este lunes las cuentas de acciones de los empleados, a escasos diez días de la fecha límite para que el multimillonario consiga la financiación necesaria para sellar la adquisición.
Desde la página de preguntas frecuentes para empleados, la compañía indicó que a partir de esta semana, el personal no podrá acceder ni hacer transacciones con las acciones de la empresa desde el Equity Award Center, "anticipándose al cierre de la adquisición de Twitter por parte de Musk". De esta forma, se podrá "realizar la conciliación final de las cuentas de los empleados antes del cierre de la operación", según se ha indicado en la actualización de la página web, y volverán a estar disponibles a principios del próximo mes.
Musk y Twitter se acercan finalmente al límite del plazo concedido hasta el 28 de octubre por la juez Kathaleen McCormick para que ambas partes lleguen a un acuerdo y eviten así la batalla legal, que estaba prevista para esta semana. La incertidumbre de la operación también se ha contagiado en la plantilla. Los empleados han estado esperando ansiosamente que se cierre el trato desde que el multimillonario anunciara el pasado abril su intención de hacerse con la red social; pero los cambios de decisión del dueño de Tesla y los anuncios de futuros despidos han agudizado el descontento del personal.
De hecho, en Blind, una aplicación anónima para que los empleados conversen entre sí, algunos han comenzado a compartir consejos con colegas sobre cómo prepararse para los recortes de personal. Otros han optado por marcharse antes de que se concrete la adquisición. Un exempleado de Twitter ha señalado a Business Insider que luego de que Musk lanzara su OPA, la compañía se detuvo: "La empresa dejó de cubrir vacantes y limitó las contrataciones, lo que añadió una gran presión a los equipos", aseguró.