La Cámara recorta sus previsiones de crecimiento hasta el 4,1% este año y el 2,2% para 2023
A pesar de que estima que en el segundo trimestre del próximo año puede registrarse una tasa negativa, descarta la recesión
La Cámara de Comercio de España a la vista de los últimos acontecimientos y datos económicos conocidos ha decidido rebajar sus previsiones de crecimiento del PIB tanto este ejercicio como para el próximo, si bien de momento descarta que vaya a producirse una recesión económica, definida como dos trimestres consecutivos de caída del producto.
La economía española crecerá este 2022 el 4,1%, según la institución presidida por José Luís Bonet, lo que supone dos décimas menos que las estimaciones realizadas en julio y dos décimas menos que la última estimación del Gobierno. De cara al próximo año el frenazo se traduce en una tasa del 2,2%, en este caso seis décimas menos que las estimadas en julio y medio punto menos de la previsión del Ejecutivo.
El servicio de estudios de la Cámara de España estima que el momento de mayor atonía puede registrarse a lo largo del segundo trimestre de 2023, que es cuando el PIB podría incluso a llegar a registrar el signo negativo, si bien volvería a recuperarse a lo largos de los siguientes trimestres.
En materia de inflación la Cámara revisa al alza su anterior estimación para situarla en el 8,4% de media este año, ocho décimas más y en el 3,9% en 2023, en este caso seis décimas más que en su anterior estimación realizada en julio. Por lo que respecta a la tasa subyacente esta entidad estima una media anual del 4,8% este año y el 4% para 2023.
Esta institución estima que el ritmo de creación de empleo será inferior a lo estimado en julio, con tasas del2,8% en 2022 y del 1,4% en 2023, lo que no impedirá que la tasa de paro prosiga con su tendencia descendente hasta situarse de media en el 13,2% en 2023.
El menor dinamismo en 2023 se deberá, sobre todo, a la ralentización de la inversión empresarial. La formación bruta de capital fijo crecerá el próximo año un 3,3%, prácticamente la mitad de lo esperado para este ejercicio, sobre todo por la menor pujanza de la inversión en bienes de equipo y el menor pulso enla construcción.