No eche a rodar sin pasar por el taller
El mantenimiento periódico pesa más que las grandes reparaciones de carrocería en el sector
La mayor operación salida del verano está a la vuelta de la esquina. Más de 48 millones de españoles cogerán su coche este fin de semana, sábado 30 de julio y domingo 31, y el próximo lunes 1 de agosto, para desplazarse por carretera hasta su lugar de veraneo. En total, solo entre julio y agosto, se realizarán más de 93 millones de desplazamientos, un 2,4% más que en los dos meses estrella de la época estival en 2021, según datos de la DGT (Dirección General de Tráfico).
Un volumen de circulación que hace imprescindible la visita al taller. La revisión y puesta a punto del coche evitará tener contratiempos indeseados y comprometer las vacaciones. A pesar de la crisis, la subida de los precios de la energía y combustibles, la falta puntual de algunos recambios y piezas, los talleres están capeando con mucho músculo el temporal.
“El problema no es tanto la carga de trabajo, razonablemente buena en este primer semestre del año, sino la pérdida de rentabilidad, debida a la subida de la energía y al encarecimiento de los recambios y otros suministros, además de las subidas medias en los salarios de los trabajadores. En suma, “los talleres intentan minimizar el impacto de la inflación en las facturas de sus clientes a costa de hacer esfuerzos internos que son cada día más inasumibles”, explica Nuria Álvarez, directora de relaciones institucionales de la Confederación Española de Talleres de Reparación de Automóviles y Afines (Conepa).
Desde otra de las patronales del sector, Cetraa (Confederación Española de Talleres de Reparación de Automóviles y Afines, tampoco han percibido “una disminución de los chequeos a los coches. Es cierto que a lo largo del año hay períodos con más demanda que otros, como Semana Santa o verano, y que, después de estos picos, baja. No se puede decir que vayamos menos al taller, sobre todo las personas que utilizan el coche por necesidad, no se saltan los chequeos”, apunta José Rodríguez Robayna, miembro del comité ejecutivo de Cetrraa.
Mantenimiento versus reparaciones
Álvarez (Conepa) precisa que “las operaciones de mantenimiento periódico representan el capítulo con mayor estabilidad de demanda de servicios de taller, frente a grandes reparaciones (las que más han caído desde la crisis Covid) y a reparaciones de carrocería (producidas generalmente por colisiones durante el tráfico. La menor movilidad es la causa de esta realidad”.
Lo que sí se ha percibido, reconoce la directiva de Conepa, es “una tendencia un poco diferente en el acumulado del año: empiezan a pesar más las operaciones de reparación sobre las de mantenimiento”.
De hecho, las ventas de los talleres de reparación y mantenimiento de autos han crecido un 7% en el primer semestre del año, con una facturación de 6.330 millones de euros, lo que la sitúa muy cerca de las cifras prepandemia, tan solo 0,5 puntos por debajo, según datos de Conepa.
La evolución de la actividad –número de entradas al taller– registra un crecimiento más moderado, en torno al 5%. “Tan solo uno de cada cuatro talleres ha ajustado en los últimos meses su precio/hora a la subida de costes de su empresa, lo que repercute negativamente en su rentabilidad, que desciende por encima del 20%. Dos de cada tres empresas del sector prevén elevar su mano de obra en los próximos tres meses”, detalla el informe.
“La subida en la factura media, en torno al 2,5%, se debe al incremento de precios de los recambios y de otros materiales”, precisa la misma fuente. “Los talleres trabajan y facturan más, pero ganan menos, lo que representa una amenaza en momentos en los que son necesarias inversiones constantes en equipamiento y formación”, señala Víctor Rivera, secretario general de Conepa”.
A pesar de la bonanza de las cifras para el sector, la incertidumbre planea sobre las previsiones del segundo semestre debido a “la subida inquietante de los precios y, especialmente, de los combustibles. La situación internacional augura una pérdida del poder adquisitivo de los clientes y una reducción drástica del kilometraje medio, lo que se traducirá en menos operaciones y con menos rentabilidad”, advierte Conepa.
Esta actividad tampoco ha sufrido la escasez de productos. “El trabajo que se realiza en los talleres sigue siendo el mismo. Es cierto que, en la industria del motor, como en otras, algunos componentes pueden tener alguna demora y hacer que ciertas reparaciones se alarguen un poco más de lo habitual, pero no es lo usual”, afirma Jocelyne Bravo, director de clientes y marketing digital de Midas España.
Más revisiones
Bravo asegura que “los conductores son cada vez más conscientes de la importancia del mantenimiento del vehículo y suelen realizar más revisiones para preparar su vehículo para el buen tiempo, por lo que los chequeos no disminuyen. Las visitas al taller siguen aumentando considerablemente, a pesar de la crisis”.
Sobre el impacto de la subida de los combustibles sobre los talleres, la portavoz de Midas señala que “si esta perdura en el tiempo, puede haber impacto en el kilometraje medio de los vehículos y si hacen menos kilómetros, necesitarán menos el taller”.
En la misma línea, Álvaro León, director de EuroTaller, explica que, “conforme se fueron levantando las restricciones y en lo que llevamos de año, se ha ido recuperando el uso del vehículo particular; aún con mucha gente teletrabajando, hay más desplazamientos en autos particulares –incluso más que antes de la pandemia– y esto ha notado en una mayor actividad en las empresas que mantienen y reparan vehículos”.
“El gasto por vehículo –añade– no se ha incrementado, debido a que la antigüedad del parque sigue aumentando, superando los 12 años de media, por lo que la inversión del consumidor se reduce de acuerdo con el valor del vehículo”.
César Sanz, secretario ejecutivo de Fagenauto (Federación de Asociaciones de Agentes Oficiales de la Automoción), pone el acento en los servicios oficiales. “Los mantenimientos y reparaciones de vehículos están siendo fundamentales para mantener a flote sus cuentas de resultados”.
También insiste en la incertidumbre económica y a la antigüedad del parque automovilístico español: “En este contexto, las familias no terminan de decidirse a renovar sus coches, así que cuidan el que tienen y procuran su mejor estado posible de conservación”, añade.
En opinión de Jordi Ortega, responsable de la red de expertos en chapa y pintura CertifiedFirst, “los talleres de carrocería han sido los que más y mejor han optimizado sus procesos, consiguiendo no solo defender una rentabilidad adecuada para su negocio, sino procurar la mejor experiencia de cliente que un reparador pueda ofrecer tanto a los clientes particulares como a los corporativos, aseguradoras y flotas”.
El sector coincide en que es fundamental llevar el coche siempre a punto, cumplir con las revisiones periódicas. “La revisión del auto no es un gasto, es una inversión en seguridad vial y calidad del aire”, sentencia Sanz, de Fagenauto.
Puesta a punto para ponerse en carretera seguro
El 77,30% de los españoles es consciente de la importancia de la revisión del vehículo, especialmente en vacaciones, según un estudio de Midas, pero tampoco descuidan los chequeos periódicos el resto del año. Se puede decir que la estacionalidad –verano, puentes, Semana Santa…– ha perdido fuerza en favor de la regularidad, señalan desde Conepa.
Los avances tecnológicos en el automóvil nos avisan de cuándo hacer las revisiones y el asesoramiento de los profesionales hacen el resto.
Chequear elementos como la batería o los frenos es imprescindible, “ya que pueden sufrir graves problemas y poner en peligro nuestra seguridad y la del resto de conductores”, advierten desde Midas.
En este sentido, desde Oscaro, la plataforma de venta de recambios online, insisten en la importancia de la batería, ya que es “la responsable de abastecer de energía a todos los sistemas del vehículo. El calor tiene una gran influencia sobre su estado de salud y desempeño, puesto que puede provocar que el auto se descargue y hacer que las piezas electromagnéticas envejezcan más rápido, acortando su vida útil”.
Otro de los elementos que hay que tener en cuenta, no solo al salir de vacaciones, sino siempre, son los neumáticos, los únicos que nos mantiene en contacto con el asfalto. Los expertos aconsejan revisar desde la presión hasta la banda de rodadura.
Además, para garantizar una correcta visibilidad en la carretera, es necesario comprobar que el estado de los faros, las escobillas y limpiaparabrisas del coche es el correcto.
Por último, pero no menos importante, hay que vigilar los niveles de aceite, refrigerante, líquido de frenos y comprobar que no haya alguna fuga visible.