La individualización de los riesgos
El negocio evolucionará desde la mutualización a la personalización de los productos
La digitalización de los modelos de consumo, el despliegue acelerado de nuevas tecnologías, la evolución demográfica, el cambio climático, la pandemia y el incremento de los riesgos (como los ciberataques) son algunos de los desafíos a los que se enfrentan las aseguradoras. El negocio ha vivido una profunda transformación en los últimos años, “ha demostrado ser resiliente, solvente y rentable, y ha situado al cliente en el eje central”, asegura Teodoro Gómez Vecino, socio del sector seguros en Deloitte.
El experto ejemplifica esa información con el uso de la inteligencia artificial en variedad de procesos internos y de cliente, con la analítica avanzada o predictiva para la gestión del dato, la robotización de procesos, los servicios en la nube o la adopción de modelos operativos de tecnología orientados a productos (en lugar de proyectos), que “ya son una realidad y que están reconfigurando la industria”.
Un camino que para Amalio Berbel, socio responsable de seguros de KPMG en España, “no cabe duda de que el sector seguirá trazando”. Principalmente por dos tendencias; por un lado, la sociedad está avanzando en digitalización y dentro de diez años esa evolución será mucho más acusada. Y, por el otro, las propias compañías se han dado cuenta de que en ese mundo hay un win-win: los costes son más reducidos y el servicio y la satisfacción del cliente aumenta.
Y ejemplo de ello es Mapfre. En su nuevo trienio (2022-2024) contempla llegar a la digitalización de todos los procesos y modelos de negocio, y el pasado ejercicio comercializó 468.000 pólizas con origen en internet. Pero, por mucho que avance la tecnología, esta no acabará con la presencialidad. Una encuesta realizada a escala global por EY demostraba que la generación milenial quiere contar con asesoramiento personalizado en los productos personales de vida, especialmente de ahorro financiero, e incluso para salud.
El segmento ‘silver’, en el centro de las soluciones ante el envejecimiento de la población en España
De igual modo, los expertos coinciden en que en los próximos años el sector tenderá a la hipersonalización de los servicios. “Vamos a vivir la evolución desde un concepto de mutualización de la relación del cliente hacia la personalización de los riesgos en función de su tipología y casuística”, explica Gómez Vecino.
“El seguro se va a acercar a las personas y a sus necesidades. Personalizar, integrar y adaptar productos y servicios multisectoriales serán las tres claves. Todo para garantizar soluciones para cada momento vital”, apoya Maribel de la Vega, socia de seguros de EY.
Otra de las grandes tendencias que experimentará será “la creación de productos centrados en las asistencias o en los accidentes para el sector silver, que para 2035 se espera que supere el 40% en España”, finaliza De la Vega.
Innovación abierta
“El sector asegurador tiene mucho camino por recorrer”, afirma Ana Zamora, CEO y cofundadora de Vitaance. Según la directiva de la insurtech, “para las grandes aseguradoras no es sencillo innovar, ya que han de activar grandes proyectos de gestión de cambio y mover demasiadas palancas”, pero al mismo tiempo considera que el panorama es alentador al apreciarse un giro hacia la innovación abierta, “donde las grandes corporaciones colaboran y abren sus puertas a otras organizaciones, más pequeñas y ágiles y, sobre todo, que nacen digitales y con un ADN de cambio e innovación difícil de imitar”. Así, Mapfre cuenta con Open Innovation (MOI), una plataforma de innovación abierta cuyo objetivo es convertirse en el referente mundial de las insurtech, además de con dos empresas digitales, Verti y Savia.