El Congreso da la luz verde final a los Presupuestos para 2022
La enmienda referente a la promoción de las lenguas cooficiales es aprobada con 281 votos a favor, 62 en contra y una abstención
El Gobierno de coalición puede estar tranquilo un año más. El Congreso de los Diputados ha aprobado este martes definitivamente los Presupuestos Generales del Estado para 2022, la ley más importante para cualquier Administración. Lo ha hecho en una sesión plagada de ausencias, pues el voto a distancia se ha vuelto a habilitar ante el avance de la sexta ola del Covid-19, impulsada por la nueva variante. Tan solo el 50% de la plantilla del PSOE y el PP ha ido al recinto; el resto de los grupos parlamentarios han reducido a máximos su delegación, asistiendo en algunos casos únicamente sus portavoces titulares. Eso sí, no ha faltado el presidente Pedro Sánchez ni las dos vicepresidentas socialistas, Nadia Calviño y Teresa Ribera.
Durante la votación se ha aprobado por mayoría, con 281 votos a favor, 62 en contra y una abstención, el único cambio introducido por el Senado la semana pasada, referente a la dotación de 1,6 millones de euros para la promoción de las lenguas protegidas por la Carta europea de las lenguas regionales en las comunidades de Galicia, Asturias, Euskadi, Navarra, Aragón, Cataluña, Valencia y Baleares. El resto de la ley no se ha discutido y, de hecho, en ningún momento estuvo en riesgo, pues en diciembre logró superar cualquier veto en el Senado.
La enmienda, impulsada por Compromís y apoyada en la Cámara alta por el PP, provocó que las cuentas tuvieran que volver al Congreso, retrasando su aprobación una semana y dando un pequeño chasco al Gobierno, que pese a todo cumplirá con el calendario pues las cuentas entrarán en vigor el próximo 1 de enero. Durante la sesión no faltaron las críticas al PP tras su última acción tomada en el Senado para entorpecer el calendario del Ejecutivo. La portavoz socialista, Montse Mínguez, ha acusado a la bancada azul de buscar cualquier escollo para entorpecer al Gobierno. “Se han metido un gol en su propia puerta que demuestra hasta qué punto llega su desesperación”, les ha dicho mientras les recordaba que semanas antes se opusieron en la misma tribuna a la inmersión lingüística.
Tanto el portavoz de Vox, Espinosa de los Monteros, como el de Ciudadanos, Guillermo Díaz, han acusado al partido presidido por Pablo Casado, de apoyar enmiendas de partidos separatistas con tal de entorpecer al PSOE. "Algún estratega en Génova pensó que con esta enmienda fastidiaba a Sánchez, aunque sea a costa de los españoles", ha reprochado Díaz. Por su parte, el diputado de Vox ha calificado de “grave” que el PP se haya “unido” a partidos como ERC, PNV, JxCAT o Geroa Bai para financiar "chiringuitos lingüísticos".
Gabriel Rufián, portavoz de ERC, ha recriminado la enorme irresponsabilidad de celebrar un Pleno “innecesario” en plena ola de contagios. Su discurso ha sido rematado con dos frases dirigidas hacia el PP: “vaya papelón que han hecho con esta enmienda” y “dejen de imitar a Vox”. A sus quejas se ha sumado la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, quien a pesar de ver con buenos ojos la promoción de las lenguas cooficiales, ha lamentado que se haya tenido que “exponer a cientos de personas” en plena ola de contagios, solo porque el PP “quería llenar los medios con sus soflamas hasta la última semana del año".
Antes las acusaciones, el portavoz del PP Mario Garcés ha defendido el respaldo de su partido a la enmienda arguyendo que “entre el supremacismo de algunas formaciones políticas (la bancada de izquierda) y el reduccionismo de otros (Ciudadanos y Vox), están ellos, que cumplen con lo que dicta la Constitución”.
Por último llegó el turno de Pedro Sánchez, quien ha subido a la tribuna para reivindicar la aprobación "en tiempo y forma" de los Presupuestos y agradecer a las 15 formaciones políticas que la han respaldado. Ha presumido además de los 12 acuerdos sellados en este periodo con la patronal y los agentes sociales. "Creo firmemente que el acuerdo social es la mejor receta para hacer reformas estructurales inclusivas y perdurables en el tiempo", ha asegurado después de recordar que la aprobación de la nueva reformal laboral y la de pensiones se pone fin a una era de contrarreformas impulsadas por el PP en 2012 y 2013.
Estos son los segundos presupuestos del Gobierno de coalición, centrados, igual que los anteriores, en reforzar la recuperación económica tras la pandemia. Parten de un techo de gasto récord de 196.142 millones de euros (un 0,02% más que en 2021), aprovechando la incorporación de 27.633 millones de las ayudas europeas. Dispara el gasto social a 248.391 millones (un 3,6% más) e incluye una partida de más de 40.000 millones (9,6% más) en inversiones y transferencias de capital.