Andrew Tan exhibe el éxito de Emperador en España
El multimillonario chino-filipino renombra la madrileña Torre Espacio como su marca de brandi
Los imperios van y vienen, y las tornas parecen estar girando hacia oriente. De allí viene Andrew Chong Buan Lim Tan (Quanzhou, China, 1952), que hace casi cuatro décadas se quedó prendado de los licores jerezanos, entre ellos Fundador, que le inspiró para crear su marca de brandi Emperador. Después de hacer fortuna, volvió a España para comprar las bebidas que le enamoraron, y de paso la madrileña Torre Espacio, que ahora se llamará Torre Emperador Castellana.
Tan, con un patrimonio de 2.600 millones de dólares (2.200 millones de euros), según Forbes, preside el grupo Alliance Global, con intereses en el sector inmobiliario, a través de Megaworld; en hoteles y casinos, mediante Travellers International; en las franquicias de McDonald’s en Filipinas, con Golden Arches; y la bodeguera Emperador, que produce la mayor marca del mundo de brandi por volumen de ventas.
En España posee desde 2015 el rascacielos Torre Espacio, comprada al grupo Villar Mir, además de bodegas de Jerez (Cádiz) y Tomelloso (Ciudad Real) con marcas como Fundador, Harveys, Terry y Tres Cepas.
A Tan le gusta nadar y correr sobre la cinta en el gimnasio, además de cocinar, combinando Emperador Light o Fundador Light con adobo filipino y alitas de pollo (y desayunar en un McDonald’s). Está casado con Katherine, que ocupa varios puestos en los consejos del grupo. Viven en Manila y tienen cuatro hijos (tres varones y una fémina); el mayor, Kevin, es desde 2018 el consejero delegado de Alliance. Se ocupa de todas las actividades públicas del grupo, mientras su padre prefiere estar fuera de los focos.
Andrew Tan nació en la provincia de Fujian, al sureste de China (en la costa del estrecho de Taiwán). Zona de fuertes lluvias, su madre lo cargaba en la espalda para protegerlo de las inundaciones. Su padre era un trabajador industrial filipino emigrado, que le enseñó la importancia de madrugar para prosperar (se levanta a las cinco de la mañana).
A los cuatro años de edad, Tan y su familia se mudaron a Hong Kong, donde compartieron vivienda, de un baño, con otras cuatro. El propietario del apartamento llegó a alquilar el pasillo a una quinta. Luego se fueron a Filipinas, a un piso de 20 metros cuadrados en el centro de Manila.
Tan estudió brevemente en el Instituto Anglo-Chino Quiapo. Cursó Administración de Empresas en la Universidad del Este: era el primero de su estirpe en hacer una carrera, que se pagaba en parte dando clases particulares. Para ahorrar en transporte, caminaba muchos kilómetros al día. Su sueño era montar su propio negocio para hacer la vida de su familia más fácil y mejor.
Su madre era muy cariñosa, pero también muy estricta, y Tan, cuenta su esposa, trataba de impresionarla con sus notas. Se graduó magna cum laude en 1974, y para celebrarlo su padre descorchó varias botellas del brandi Fundador. Era todo un lujo para ellos, y la primera vez que Tan lo probaba.
Un compañero de uno de sus primeros trabajos lo recuerda en un reportaje del portal filipino PhilStar Global como muy trabajador y concienzudo. Winston Sy Co, presidente y CEO de Emperador, lleva trabajando con él desde 1979. Por entonces, Tan tenía un negocio llamado Unisphere International, que importaba electrodomésticos de la marca estadounidense Sunbeam.
Debut en el alcohol
En 1980, creó la empresa Consolidated Distillers, con la que lanzó el whisky Andy Player, aunque no tuvo demasiado éxito, al tratarse de una clase de licor con mucha competencia. Durante los años siguientes, Tan visitó Jerez y otros lugares de España para conocer sus bodegas. En Sevilla, pidió a un amigo español que le propusiera un nombre inspirado en Fundador para su propio brandi. Tras rechazar Conquistador por sonar demasiado agresivo, el amigo propuso Emperador.
La bebida se introdujo en el mercado filipino en 1990. Hasta entonces no había surgido una marca local de brandi. La publicidad de Tan rechazaba la línea habitual de mostrar mujeres atractivas: en su lugar, destacaba el éxito y todos los valores asociados a él, como el trabajo duro, el empuje, la ambición, la profesionalidad y escuchar los consejos de los padres. También fue idea de Tan que en los anuncios las personas solo llevaran abrigos y trajes.
Un año antes, en 1989, Tan había fundado Megaworld, su compañía inmobiliaria. Fue pionero en el concepto de complejos residenciales a un precio asequible y que combinaban alojamiento, trabajo y ocio en una misma comunidad. Su enfoque es vender, más que un producto o una unidad residencial, “un estilo de vida”, explica su hijo Kevin. También prosperó arrendando oficinas a las florecientes empresas de servicios externalizados en el extranjero (como call centers).
En la crisis financiera asiática de 1997, la rama de bebidas, que crecía velozmente, pero de forma discreta al no estar cotizada, ayudó a sostener el grupo, afectado por el deterioro del mercado inmobiliario.
La Torre Espacio se llamará a partir de ahora Torre Emperador Castellana. Se trata de la cuarta torre más alta de España, con 235 metros de altura y 57 plantas sobre el nivel del suelo. Tan la compró por 558 millones de euros. También es dueño de Torre Diagonal (Barcelona), adquirida a Telefónica, y del 49% de Caleido, la quinta torre de la zona norte de la Castellana (el resto es de Villar Mir).
Con el cambio de nombre, el emperador de oriente Andrew Tan cierra definitivamente el círculo que comenzó hace casi cuatro décadas, en una bodega de Jerez.