Formación bonificada para los trabajadores de tu pyme
El porcentaje de bonificación lo establece la Ley de Presupuestos Generales del Estado
Las empresas que cotizan la contingencia profesional disponen de un crédito bonificado para la formación de los trabajadores. El importe que se aplica en estos casos procede al aplicar la cuantía que ingrese la empresa durante el año anterior por la formación profesional.
Según explica la Cámara de Comercio, el porcentaje de la formación bonificada lo establece la Ley de Presupuestos Generales del Estado y varía en función del tamaño de la empresa.
Así, las empresas de entre 1 a 5 trabajadores perciben unos 420 euros al año. Si tienen entre 6 y 9 trabajadores les corresponde el 100% de la bonificación. El tanto por ciento desciende en función del número de empleados. Las compañías de entre 10 y 49 trabajadores reciben el 75% de la bonificación. Por otro lado, la bonificación es del 60% en compañías de entre 50 y 249 trabajadores, mientras que es del 50% cuando se trata de empresas de más de 250 trabajadores.
Para que la empresa pueda bonificar la formación debe dar información a la representación legal de los trabajadores. Además de eso, se debe comunicar al inicio de la formación, se debe realizar la formación y comunicarlo también cuando ésta finalice.
Para beneficiarse de las bonificaciones, las empresas tienen que estar al corriente de sus obligaciones fiscales frente a la Agencia Tributaria y la Seguridad Social. También deberán abonar las facturas relativas a la acción formativa desarrollada antes de aplicarse la bonificación.
Documentación justificativa
Las compañías deben guardar durante un mínimo de 4 años la documentación justificativa de la formación. Si se trata de pymes, al tratarse de acciones formativas cofinanciada con fondos comunitarios (FSE), las empresas también tendrán que mantenerse a disposición de los órganos de control.
Se deberá, por otro lado, facilitar a los organizadores la documentación y los datos que son necesarios para realizar las gestiones ante la Fundación Tripartita. Estas bonificaciones permiten a las pymes invertir más valor al factor humano que las compone. El personal necesita una formación continua para reorientar sus conocimientos y conseguir un buen desarrollo del negocio.