Solo ocho actividades tienen a más del 5% de sus empleados en ERTE
Casi la mitad de la reducción se produce en alojamiento y comidas y bebidas Solo 11 sectores han reactivado a más de un millar de empleados en agosto
El ritmo de salida de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) se ha ralentizado en gran medida en varias actividades en los últimos meses porque, simplemente, dichos sectores ya casi han reactivado a todos sus empleados suspendidos de empleo. Tanto es así, que solo ocho actividades económicas mantienen a más del 5% de su plantilla en ERTE, según los últimos datos de afiliación ofrecidos por la Seguridad Social. Todas ellas están ligadas al sector servicios, el más golpeado por la crisis debido a las restricciones sanitarias impuestas por las administraciones públicas para luchar contra la pandemia.
Destaca especialmente el transporte marítimo, una actividad que todavía mantiene a casi cuatro de cada diez empleados en suspensión temporal de empleo (el 38,3%). Le siguen las agencias de viajes, con el 25,1%, y completa el podio el transporte aéreo con el 16%. Los servicios de alojamiento (13,3%) y las actividades de juegos de azar y de apuestas (11%) son las otras dos que superan el umbral del 10%.
Otra muestra de la concentración de los ERTE en determinados sectores es que solo 11 actividades económicas han reincorporado durante el mes de agosto a más de 1.000 personas. Donde se ha producido la reactivación más importante en términos absolutos fue en los servicios de alojamiento, con 16.352 trabajadores que salieron de los ERTE, impulsado sobre todo por el aumento de la actividad en las vacaciones de verano.
En segundo lugar, se encuentran los servicios de comidas y bebidas, con 12.642 trabajadores reincorporados. Solo estas dos actividades concentraron a casi la mitad de todos los profesionales que salieron de los ERTE durante el octavo mes del año. En total, dejaron de estar afectados por esta herramienta en agosto unas 59.296 personas.
“Hay una suave reducción del número de trabajadores en ERTE. Lo previsible es que esta tendencia continúe, quizá un poco más acelerada en septiembre. De todas formas, la cantidad que queda es un elemento prácticamente residual, muy concentrado en algunos sectores y territorios”, explicó el secretario de Estado de Seguridad Social y Pensiones, Israel Arroyo.
Por autonomías
Canarias y Baleares fueron las dos comunidades autónomas que más han reducido su porcentaje de personas en ERTE durante agosto. En el archipiélago canario, la cantidad de trabajadores en suspensión temporal pasó de representar el 7,9% de sus afiliados a la Seguridad Social al 5,9%, lo que supone una reducción de dos puntos en apenas un mes. Baleares, por su parte, experimentó una bajada de 1,3 puntos porcentuales, al pasar del 5,4% al 4,1%. Entre las dos comunidades, reactivaron a más de 20.000 trabajadores (12.908 en Canarias y 6.113 en Baleares).
Sin embargo, a pesar de esta notable reducción de su masa de personas en ERTE, son las dos autonomías que mantienen a un mayor porcentaje de trabajadores afectados por esta herramienta. En términos absolutos son Cataluña (52.926) y Madrid (52.882) las que tienen más personas en ERTE.
En contraposición, Murcia y Navarra, ambas con un 0,9%, son las dos comunidades con un menor porcentaje de personas en ERTE sobre el total de sus afiliados a la Seguridad Social. Les siguen Extremadura, Castilla-La Mancha, Cantabria y Aragón, todas ellas con un 1,1%. La barrera del 2%, además de las ya mencionadas Canarias y Baleares, solo se supera en Madrid y Cataluña (ambas con un 2,2%). Actualmente, la media del país se encuentra en el 1,8%.
Una semana intensa de negociaciones
ERTE, SMI y reforma laboral. El Gobierno, además del comienzo de las conversaciones para prorrogar los ERTE el jueves, retomará el miércoles la negociación por la reforma laboral. Esta última, en la que cuenta con el rechazo de la CEOE, que la tildó de “marxista”, no podrá alargarse “mucho más allá de octubre”, según indica CC OO, si el Gobierno quiere aprobarla antes de fin de año, tal y como se comprometió con Bruselas. Todo esto, además, en medio de la incertidumbre sobre el aumento del SMI para el que, de momento, no hay acuerdo.