Las pernoctaciones de turistas nacionales superaron los niveles precrisis en julio
El desplome de Reino Unido hunde las estancias de extranjeros y las deja un 60% por debajo de las del mismo mes de 2019
La estadística de ocupación hotelera de julio de 2021, hecha pública por el INE esta mañana, es una enmienda a la totalidad de lo que venía sucediendo en el primer mes de temporada alta en España y un reflejo de cómo el coronavirus ha dinamitado los cimientos de un sector sin apenas cambios en los últimos treinta años. Antes de la crisis sanitaria mundial, el turismo extranjero representaba el 67% de las pernoctaciones hoteleras en julio en España y Reino Unido era el gran emisor de viajeros a hoteles, con un tercio del total de estancias de viajeros (7,2 millones), seguido muy de lejos por Alemania (4,9 millones) y Francia (2,2 millones).
Dos años después, los datos revelan un vuelco sin precedentes. Los hoteles españoles recibieron 26,4 millones de pernoctaciones en julio, más del doble que en el mismo mes de 2020 (11,5 millones), pero todavía muy por debajo de los niveles precrisis (43,2 millones en julio de 2019). El primer gran cambio es la explosión del turismo nacional que ha servido para compensar el declive del extranjero. Si tradicionalmente el primero representaba un tercio de las pernoctaciones, el porcentaje se ha disparado al 56,5% del total, hasta sumar 14,9 millones de pernoctaciones, superando incluso los niveles alcanzados en el mismo mes de 2019 (14,8 millones).
Andalucía ha sido el destino menos perjudicado por el crecimiento del turismo nacional
En el otro lado, las pernoctaciones de extranjero han pasado de representar el 65,5% del total en julio de 2019 al 43,5% del mismo mes de 2021, con una caída de casi 17 millones de estancias (un 60% menos). Ninguno de los grandes mercados emisores de viajeros (Alemania, Francia, Reino Unido, Holanda o Bélgica), que sumaron el 60% de las estancias en julio de 2021, está en niveles precrisis, aunque la caída más acusada ha sido la de Reino Unido, que se ha dejado 5,7 millones de pernoctaciones por el coronavirus y que ha pasado a ser el tercer mayor mercado, con un 13,06% del total, superado por Alemania (23,3%) y Francia (14%).
Andalucía ha sido el destino más beneficiado frente al declive de las otras cinco autonomías turísticas (Cataluña, Baleares, Canarias, Comunidad Valenciana y Madrid), que han perdido de media la mitad de las pernoctaciones en comparación con el mismo mes de 2019. En el caso de Andalucía, el ajuste ha sido de tan solo un 23,5%, gracias al tirón del turismo nacional, lo que le ha permitido sumar 5,17 millones de estancias frente a las 6,75 millones de julio de 2019. Por delante figura Baleares, con 5,75 millones, lo que supone la mitad de las 10,53 millones logradas antes del coronavirus. El recorte ha sido incluso mayor en Canarias, con 2,87 millones de pernoctaciones frente a las 6,27 millones de julio de 2019, un 55% menos. Cataluña también ha perdido la mitad de pernoctaciones (de 8,1 a 4,1 millones), pese a que recibió más estancias de turistas nacionales, mientras que la Comunidad Valenciana perdió un millón de estancias (de 3,6 a 2,6 millones) y Madrid incluso superó esa cifra (de 2,2 a 1,1 millones).